Opinión

“La incomodidad como herramienta para el aprendizaje”

Por Cintia M. Torres*
viernes, 3 de septiembre de 2021 · 00:00

 En los últimos días dos palabras estuvieron en boca de muchas y muchos argentinos: “Escuela” y “Política”. La dimensión que cobró la visualización de un video descontextualizado en el que una docente mantiene una discusión política con un alumno propone, entonces, que reflexionemos sobre estas dos cuestiones.

Creo que las y los docentes tenemos una enorme responsabilidad ya que acompañamos y somos parte del crecimiento de nuestros alumnos y alumnas. Enseñamos y aprendemos a la par, nos formamos en valores, debatimos, reflexionamos de manera continua y conjunta. Somos el primer anclaje para el proceso de socialización en el nivel inicial. Nos preocupamos cuando algo ocurre con un niño o niña y notamos que algo anda mal, porque somos seres humanos y creemos que la empatía es primordial en la vida. Nos equivocamos, claro que sí, como cualquier otra persona, porque eso somos, seres humanos porque tenemos la capacidad para razonar y aprender. Lo trascendental y real de cada experiencia cobra sentido cuando reconocemos el error y pedimos disculpas. Y ese camino andamos todos los días y no nos arrepentimos de ello. A veces estamos cansados y queremos tirar la toalla, pero sabemos que raramente eso va a suceder. Porque muchos son los motivos por los que elegimos esta profesión.

Por otro lado, la política. Ciencia que es inevitable en cualquier ámbito. Es una actividad que traspasa y atraviesa la vida diaria de todas las personas. Por esto es que no debemos demonizar y ver a la política como sinónimo de mala palabra sino como una herramienta de trabajo que busca la transformación social de manera colectiva. Creo que, como educadores, tenemos la gran responsabilidad de generar estos espacios de reflexión y debate como medio para promover el compromiso y la vinculación sociopolítica. Y qué mejor que hacerlo desde un lugar cuidado y con respeto como es el aula.

Interpelados por acciones que nos movilizan, nos preocupan, nos hacen “ruido” es que utilizamos este instrumento y otros como disparadores para lograr cambios significativos en los diferentes espacios de trabajo, en los ámbitos educativos, en los barrios.

En la escuela transita la política desde los centros de estudiantes y los gremios que defienden nuestros derechos. ¿No existe, de hecho, una materia en la currícula de Educación Secundaria que se llama “Política y Ciudadanía”? Entonces, creo que deberíamos repensar estas y otras cuestiones cuando decimos que no se debe politizar la escuela.

La política es real, es necesaria. Traspasa el concepto y se vuelve, entonces, sinónimo de equidad, igualdad y transformación.

 

* Prof. de Lengua y Literatura
  Precandidata a concejal por el Frente de Todos
  Militante de la Corriente Nacional de la militancia

Comentarios

6/9/2021 | 14:37
#164794
Excelente!!!