Opinión

¡No más abandono o discontinuidad pedagógica en las Escuelas!

Cdor. Maximiliano Lavallén Director de la Escuela Educación Secundaria Técnica N° 1 de Suipacha
jueves, 6 de mayo de 2021 · 10:30

Desde hace algunas décadas la palabra Inclusión en Educación sobresale como la piedra basal del Sistema Educativo, y… ¡bienvenido sea! Las escuelas y Equipos Distritales se encuentran trabajando a full con sus equipos en búsqueda y contención de los Estudiantes, incluyendo a cada uno con las particularidades de cada individuo y sus problemas sociales (adicciones, violencia intrafamiliar, entre otros) y dificultades económicas (falta de vivienda, empleo precarizado, etc.).

A eso se debe sumar las dificultades pedagógicas en las trayectorias de los Estudiantes, generados por factores, tales como: falta de diagnósticos médicos-psicológico claros sobre los Estudiantes, falta de acompañamiento familiar, fallas en adaptación a contenidos y practicas docentes, y muchos más. A pesar del esfuerzo de los Equipos Docentes en general, aun así, el ausentismo y discontinuidad de los Estudiantes es un serio problema social, con consecuencias negativas a mediano y largo plazo en toda comunidad.

Todo Estudiante que no culmina sus estudios tendrá escasas posibilidades de encontrar un empleo a futuro y, por consiguiente, la imposibilidad de un bienestar familiar en general (salud, educación, alimentación; entre otras necesidades).

En la Argentina, según informe del Instituto de Desarrollo Social Argentino, sólo el 38 por ciento de los estudiantes terminan en tiempo y forma el Nivel Secundario de Educación. La UNESCO avala este porcentaje, ubicando a la Argentina como uno de los países de mayor discontinuación pedagógica, repitencia y abandono de la Región. Una ausencia prolongada de los Estudiantes, sin acompañamiento social correspondiente se traduce en deserción anticipada del Sistema Educativo. Desde las Escuelas está la obligación de buscarlos, volverlos a incluir y acompañarlos durante la trayectoria.

Por tal motivo, a modo de colaboración, muchas organizaciones locales podrían participar conjuntamente con Educación para lograr un trabajo en conjunto destinado a que muchos chicos vuelvan a clases. Basado en el artículo 6 de la Ley 26206 de Educación Nacional: Son responsables de las acciones educativas el Estado Nacional, las Provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en los términos fijados por el artículo 4° de esta ley; los municipios, las confesiones religiosas reconocidas oficialmente y las organizaciones de la sociedad; y la familia, como agente natural y primario.

Como trabajo mancomunado con los Equipos de Orientación Educacional Distrital, las Organizaciones de la Sociedad tales como los Clubes Deportivos, las ONG, los Merenderos de barrio, y distintas Instituciones de la ciudad, pueden colaborar brindando información sobre los registros de asistencias e información cualitativa y cuantitativa de necesidades de cada uno de los chicos que asisten a rutinas sociales, deportivas, culturales o asistencial; a cada una de las Escuelas.

Bajo la órbita de Jefatura Distrital de Educación y con el acompañamiento de la Secretarias de Deportes, Cultura y Desarrollo Social; es posible sistematizar la información y ser fundamental para coordinar acciones que tiendan a la atención de problemáticas en particular de cada familia y logrando el regreso a clases, bajo distintas estrategias trabajadas en equipo con la colaboración de las Instituciones antes mencionada. Este trabajo colaborativo entre las Organizaciones lograría identificar a los chicos que van a distintas actividades, pero no están yendo a clases.

También aplicando este control de manera conjunta y sistemática, motivara a que los niños y adolescentes que realizan ciertas actividades, tengan que cumplir con la presencialidad en clases y la actividad pedagógica de la Escuela donde está matriculado, ya que estarían monitoreado por las Escuela y los Clubes, por ejemplo. Convencido que toda problemática social se resuelve con el compromiso de todos los actores que componen una comunidad, y la deserción escolar no está exenta.

Es hora de generar acuerdos y estrategias para lograr resultados a largo plazo, traducidos en aumento de matrícula real y con acreditación de contenidos de calidad, pensando en la inserción social y laboral de nuestros Estudiantes. Es por eso que toman fuerza las palabras de un Estadista como Nelson Mandela: “La Educación es el arma más poderosa para cambiar al mundo” …y en eso estamos!

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