Opinión
Repercusión negativa por “un poco de agua sobre las piedras”. El tiro en el pie del oficialismo.
Al intendente le gusta mucho la frase “la única verdad es la realidad” y lamentablemente, hoy la realidad no juega a su favor, las fotos y los testimonios de la gente hablan por sí mismosDesde la tormenta del lunes que los ánimos no se calman en varios pueblos rurales. Todo comenzó con el reclamo de una docente de la escuela secundaria N° 14 quien tomó fotos y las subió a la red social Twitter pidiendo intervención del intendente para su mejora. La profesora habló también del daño que el estado del acceso produce en los vehículos de los docentes, y que dichas condiciones también complicaban la llegada a la escuela de los alumnos, ya que, afortunadamente, la matrícula se amplió tras pasar a independizarse de otra secundaria de Chivilcoy. A este reclamo se sumó el de varios vecinos que transitan día a día estos lugares porque trabajan en el campo o porque deben venir a Chivilcoy.
Sin embargo, por parte de la máxima autoridad del Partido, el jefe comunal Dr. Guillermo Britos, lejos de solidarizarse y comprometerse a enviar cuadrillas o a instar al delegado del pueblo –justamente su yerno, quien no vive en la localidad- a encargarse del tema, salió con los tapones de punta a acusar de odiadores y a decir que le dan vergüenza ajena quienes hacen estas denuncias. Seguramente, el palo también viene para quienes difundimos los reclamos de los vecinos y personas que van al pueblo. Constaté también que le envió mensajes privados a algunos vecinos que se manifestaron por redes, pero si bien esas conversaciones no pueden publicarse por ser privadas, sí podemos recordar sus palabras públicas en Twitter “Ahora les molesta un poquito de agua arriba de las piedras. Vergüenza ajena”, dichos apoyados además por Esteban Genaro, quien viene de administraciones (esas mismas que no hacían las obras antes de la que se hizo en 2015, con los fondos enviados por el gobierno de la provincia de Buenos Aires de María Eugenia Vidal). El ex funcionario de Aníbal Pitelli escribió “Yo sé muy bien cómo estaban los caminos rurales en el 2015, Guillermo Britos y cómo lo sufrían todos los vecinos cuando llovía. Días sin poder salir y las peripecias que tenían que hacer los servicios de emergencia para poder llegar a las localidades rurales”.
Estos comentarios cayeron muy mal, no solo en Biaus, sino en otros pueblos que viven problemáticas similares. Y como si no hubiese sido suficiente destrato a un reclamo legítimo por parte de los vecinos, el delegado de Moquehuá, quien también cumplió tareas como delegado interino de Ramón Biaus le respondió a la vecina Ivana Ledesma “Se remarca que antes sí no se podía salir, después de 45 mm de lluvia en menos de una hora el sábado y otros 45 mm al otro día es obvio que va a haber charcos con agua. El mantenimiento de ese camino consolidado de 22 km se hace 3 veces por año mínimo, al igual que los demás”. La vecina había respondido al intendente: “si lo sabré yo, viajando adentro del agua para poder ir a estudiar. Ahora las cosas cambiaron, pero eso no tiene porqué ser un conformismo. Es real que el camino de piedra necesita mantenimiento. No sé cuántos de ustedes viajan por ese camino cada vez que llueve”.
No obstante, más allá de las opiniones y defensa de una muy buena obra hecha hace 7 años, los funcionarios no pudieron explicar por qué los amortiguadores de los autos de los docentes y de otra gente del pueblo se rompen y por qué hoy, tras la lluvia de anoche, los caminos siguen sin mejorar. Esto último fue chequeado con un vecino de Biaus quien pidió confidencialidad por temer represalias: “recién vengo de Biaus, la verdad realmente, un desastre los caminos, no sé por qué no han salido a hacerle la sangría para que el agua se vaya, porque si el agua se va no se hace pozo”, comentó, y agregó que el delegado va al pueblo recién por la tarde, luego de cumplir con responsabilidades familiares “por cortesía hubiese preguntado si algún vecino le pasó algo, pero ni eso”. Consultado sobre la respuesta del intendente dijo “este hombre se enoja, no se le puede decir nada, si nadie le dijo nada malo”, aunque destacó positivamente la gestión de Cuadrelli cuando estuvo a cargo del pueblo.
Pero, como ya mencioné, estas problemáticas no son solo de este pueblo, sino que muchas son compartidas por otros. Hoy, en Buenos Días con Héctor Pedro Denezio, una vecina de Emilio Ayarza llamó y comentó: “hace dos días que estamos sin luz, están los postes caídos, todos dicen que sí, que van a venir pero obviamente ahora llueve y nadie va a venir y bueno, habrá que hacer un corte en la ruta y no dejar que pase nadie así la gente de los pueblos rurales vamos a ser escuchados con el tema de Edén”. El delegado de esta localidad tampoco es residente y vive en Chivilcoy.
Al intendente le gusta mucho la frase “la única verdad es la realidad” y lamentablemente, hoy la realidad no juega a su favor, las fotos y los testimonios de la gente hablan por sí mismos. Hay descontento y hartazgo, y pelearse con vecinos por redes sociales no ayuda. Políticamente es un gran desatino salir a calificar de odiadores a las personas y a los medios que visibilizamos un reclamo actual. No soy nadie para darle consejos, pero si se hubiese puesto a disposición de la gente, o hubiera utilizado su cuenta para anunciar que una cuadrilla estaba yendo al pueblo a prestar ayuda seguramente sus propios votantes no estarían también enojados como se hizo visible y fácilmente chequeable en las redes.