“Vemos las puertas abiertas a una ordenanza municipal que regule la fumigación”

La decisión del gobierno municipal de dejar sin efecto el convenio con AAPRESID, sobre la regulación de fumigaciones en la zona urbana, sigue cosechando adhesiones, en este caso, del referente de Conypas, Aníbal Berón.

Es una de las entidades que impulsa la agricultura sustentable, así como la mejora en la calidad del agua de Chivilcoy, junto a otras entidades de vecinos autoconvocados.

En una entrevista para LA RAZÓN, el referente del espacio, Aníbal Berón, expresó: “Celebramos la marcha atrás del municipio, es una muy buena decisión, porque el municipio nos representa a todos y, en este caso, estaría firmando con una entidad privada, donde se pone en juego a la salud de la población”.

“Si bien el uso de los agroquímicos data desde hace más de 20 años, no les da el aval que sean buenos, sino todo lo contrario, porque muchos especialistas están demostrando el daño colateral que tiene el uso de esos elementos”.

Destacó que, al hacer un análisis del convenio con la Municipalidad, “no habían puntos específicos, sino que no explicaba cómo iban a hacer la tarea del control del uso de los agroquímicos. Incluso, al final, se consignaba que, todo cambio se podía hacer en ese acuerdo, tenía que ser notificado a la sede de AAPRESID, en Rosario, Santa Fe”.

Berón añadió que esto “es un llamado a la conciencia, es una muy buena decisión del intendente a pesar de las presiones porque, como sabemos, estas entidades manejan fortunas, detrás de cada acuerdo que hacen hay mucho dinero. Es muy tentador para la economía de la ciudad pero, cuando hay dudas en cuanto a la salud de la población, me parece una muy buena determinación de parte del intendente”.

Asimismo, destacó la importancia que esté en la discusión la sanción de una ordenanza municipal que regule esta práctica. “Una ordenanza es un instrumento para la comuna, así que toda empresa privada debe acotarse a lo que se diga en esa normativa, que tendrá en cuenta a la salud de la población”.

“Estas personas que trabajan con los agroquímicos, no son nuestros enemigos –acotó- en el medio son victimarios y víctimas de un sistema que lleva a cabo, desde hace más de 20 años y las pruebas están a la vista, cómo se afecta a la vida silvestre, la tierra, el agua y sólo resiste a esos venenos los transgénicos”.

Berón agregó que, “en toda la humanidad nos tenemos que replantear qué es lo que estamos haciendo con la naturaleza, por eso aplaudo la decisión del municipio y vemos la puerta abierta a esa ordenanza municipal que regule la fumigación. Hay que dejar de lado las guerras y pensar en la salud, es decir, que se sigan las actividades agropecuarias pero que se respete la salud de los habitantes de los barrios y a las escuelas rurales”.