En el mes de julio
Las ventas minoristas pymes cayeron 5,8%
Frente a junio las ventas cayeron 0,8% (sin desestacionalizar), una baja significativa siendo que julio es un mes donde naturalmente suben empujadas por las vacaciones de invierno.Las ventas minoristas de los comercios Pymes finalizaron julio con una caída de 5,8% frente a igual mes del año pasado (medidas a precios constantes). Acumulan una baja de 3,2% en los primeros siete meses del año. Frente a junio las ventas cayeron 0,8% (sin desestacionalizar), una baja significativa siendo que julio es un mes donde naturalmente suben empujadas por las vacaciones de invierno. Estos datos fueron dados a conocer por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), entidad que forma parte el Centro Comercial, Industrial y Servicios de Chivilcoy.
El mercado de consumo acusó la caída en el poder adquisitivo, y si bien hubo muchas ofertas y liquidaciones, no alcanzó para contener la baja. El dólar, más quieto, fue un dato positivo, porque evitó que la gente destine su liquidez a comprar divisas, pero las tarjetas cargadas y las pocas oportunidades de cuotas sin interés retuvieron al consumidor.
Las caídas más fuertes por provincias ocurrieron en Salta, Jujuy, Chaco, Tierra del Fuego, Catamarca, La Rioja, Santiago del Estero y Ciudad de Buenos Aires, con bajas mayores a 10% en el promedio de los rubros relevados. Las ciudades de frontera se vieron menos perjudicadas porque el tipo de cambio más alto desactivó compras a países vecinos.
Así también, las vacaciones de invierno, donde viajó más gente que el año pasado y gastaron más de $21 mil millones, ayudaron a frenar el impacto negativo. Pero se notó la menor liquidez en la calle, porque el gasto turístico se orientó a hotelería, gastronomía, transporte, cultura o recreación, postergándose para ello las compras de bienes como indumentaria, electrodomésticos, calzados, muebles y otros rubros, donde las bajas en las ventas fueron acentuadas.
En julio sólo el 23,2% de los comercios consultados tuvo alzas anuales en sus ventas (en junio 24,3%, en mayo 25,8% y en abril el 32,8%). En cambio, el 69,1% tuvo variaciones negativas y el 7,7% se mantuvo sin cambios.
Para los próximos meses el panorama esperado por los comercios no es muy alentador. Sólo el 37,5 % de los empresarios consultados cree que las ventas repuntarán, mientras que el 37,3% no espera cambios y el 25,2% sostiene que continuarán cayendo.
Principales variaciones en las ventas
Las siguientes fueron las principales variaciones en las ventas a precios constantes en julio de 2018 frente a igual fecha de 2017 relevadas en 2000 comercios físicos del país:
-Las ventas minoristas cayeron 5,8% en julio de 2018 frente a igual fecha de 2017. Es la mayor caída anual en 20 meses. La estabilidad cambiaria y las vacaciones de invierno, donde los turistas gastaron $21 mil millones, ayudaron a frenar el impacto. Pero igual se notó la menor liquidez en la calle.
- Los 19 rubros relevados cayeron en la comparación anual. Las caídas superaron al 8% anual en “Marroquinería”, “Muebles” y “Electrodomésticos y Electrónicos”, que fueron tres de los rubros más afectados por la retracción de la demanda.
-En “Electrodomésticos y Electrónicos”, las ventas a precios constantes bajaron 8,1% frente al mismo mes del año pasado. Y en lo que va del año este rubro acumula una caída de 3,1% anual. Lo que más se vendió en el mes fueron televisores por el mundial, calefactores por el frío y celulares. -En “Alimentos y Bebidas” las ventas a precios constantes bajaron 3,7% anual y acumulan una caída de 1,5% en los primeros siete meses del año. El Día del Amigo, aunque de poca incidencia todavía, favoreció al sector, que vendió más que el año pasado.
-En “Indumentaria” las ventas cayeron 4,8 % frente al mismo mes del año pasado y acumulan una baja de 4,2 % en los primeros siete meses del año (siempre medidas a precios constantes). Fue uno de los rubros más complicados, que debió salir a pelear mercado con bajas de precios de hasta 50% a pesar de las subas aplicadas por muchos proveedores en la mercadería. Las vacaciones de invierno no ayudaron, porque la gente que viajó minimizó sus compras de ropa.