Opinión
"El fondo y las formas"
No importa la dureza de las palabras. No tiene mayor relevancia si una carta se hace pública luego de agotarse instancias privadas de diálogo.
La armonía política de un gobierno tiene sentido si el rumbo es el correcto y el pueblo crece en paz y prosperidad. Pero si el desencanto acecha, los políticos de raza anteponen su visión urgente y gritan sus verdades.
Prefiero la tensión de los vientos y maniobrar rápido, que un gobierno oscuro que endeude, extermine empresas y fugue divisas a espaldas del pueblo.
No me importan las formas por ahora. Por supuesto que sí me importarán dentro de 20 o 30 años cuando (ojalá) seamos un país más desarrollado.
Ahora quema la pobreza, el dolor del alimento caro y los remedios incomprables.
Sólo salir del pozo nos traerá el verdadero alivio y la real esperanza.
Seguimos pensando.