Editorial
"Nos lee, nos critica… y nos da la razón"
Por Marcelo LopardoAl intendente de los últimos diez años en Chivilcoy no le gustan las críticas. Eso lo sabemos. Lo que tal vez sorprende es la facilidad con la que pasa de la gestión a la victimización. Esta semana, ante la sola mención de una posibilidad política –como la de reubicarse en algún cargo este mismo año– eligió dirigirse a los medios con tono admonitorio, casi como si cuestionar sus movimientos fuera un acto de traición.
No se trató de una denuncia, ni de una campaña sucia. Apenas una lectura política, compartida en nuestras páginas, sobre una figura que hace rato viene moviéndose con lógica electoral. Pero el intendente, en vez de dar respuestas políticas, eligió el camino más cómodo: colocarse en el lugar del perseguido, del incomprendido, del blanco de una operación. Difícil de sostener cuando se tiene una gestión que, nos guste o no, ha gozado de amplias mayorías legislativas y de un control casi total del ecosistema mediático local.
Y aquí es donde debemos agradecerle, sinceramente, por ubicarnos en la cima del sistema de medios. Porque aunque sabemos que cuenta con TV a su disposición, una radio propia, con medios aliados, con una generosa pauta en medios provinciales y regionales, elige leer, escuchar y reaccionar ante lo que escribimos desde LA RAZON. Algo estaremos haciendo bien si eso lo incomoda.
No se le puede pedir a un intendente que no tenga estrategia política. Pero sí se le puede pedir que no reaccione con altanería cada vez que se menciona lo obvio: que su ciclo se estira, que busca reubicarse y que, quizás, no todos están dispuestos a aplaudirlo sin hacer preguntas.