Casos
El caso de picadas en Pinamar, muestra lo que falta hacer en nuestra ciudad en material vial
Por Dr. Emmanuel LangonePor si algún distraído no supo, en las afueras de Pinamar, entre sus dunas, se concentraban todos los veranos centenares de vehículos areneros para realizar pruebas de velocidad, carreras, acrobacias o fiestas. Camionetas 4X4, UTV, cuatriciclos o motos, conductores sin cascos, menores al volante, piruetas, o sea, todo un descontrol. Lo mismo que sucede en nuestra ciudad pero sin dunas.
Todos los años se sumaban accidentes por imprudencias. Muchos heridos graves e incluso muertos.
La hoya es un sitio privado, sin jurisdicción municipal, pero, aún así, se las ingeniaron para realizar un gran operativo. Tan sencillo como les voy a narrar, decidieron que no podrían ir con móviles porque sería una confrontación, se fugarían como es lógico que reaccionen. Lo más inteligente fue infiltrar agentes y filmar absolutamente todo, incluyendo los rostros de quienes manejan, las patentes de los rodados, las características de las personas. Luego se los esperaba a la salida de La Frontera y, a medida que salían los identificados, los detenían y secuestraban los vehículos. Una excelente política de control que busca prevenir y evitar lo evitable, accidentes con lesionados graves o incluso muertes. Con esta causa se los imputa de lo dispuesto en el art 193 bis CP, con pena de prisión de seis (6) meses a tres (3) años e inhabilitación especial para conducir por el doble del tiempo de la condena, por crear una situación de peligro para la vida o la integridad física de las personas, mediante la participación en una prueba de velocidad o de destreza con un vehículo con motor, realizada sin la debida autorización de la autoridad competente.
Esta causa abre la puerta en caso de un incumplimiento, es decir al conducir sin licencia para imputar el delito de desobediencia y así poder detener a esas personas y así dar el ejemplo para que estos sucesos esperados no sucedan más. Se puede, siempre se pudo, solo falta voluntad.