Comisario Mayor Miguel Ángel Costa
“La accidentología vial es un problema multifacético”
El jefe de la Policía Vial Chivilcoy (Zonal II) dialogó con LA RAZÓN en el marco del Día del Camino y de la Seguridad Vial. Con respecto a las estadísticas, citó que en lo que va del año, sobre la RN 5 entre Mercedes y Alberti, se registraron 30 siniestros con seis personas fallecidas.El Comisario Mayor Miguel Ángel Costa, tiene bajo su órbita la Zona Operativa II Mercedes del área de Seguridad Vial, con asiento físico en Chivilcoy, coordinando los distintos destacamentos policiales repartidos en las localidades de 9 de Julio, Bragado, Chivilcoy, Mercedes, San Andrés de Giles, San Antonio de Areco, Luján, y General Las Heras; “la accidentología vial es un tema de gran preocupación en nuestra comunidad”, expresó, “como efectivo policial y encargado de la Zona Operativa II Mercedes, conjuntamente con los distintos destacamentos que coordino, se observan tendencias y patrones que se presentan en los accidentes de tránsito, así como la necesidad de implementar medidas de prevención efectivas”.
Estadísticas del 2024
Al ser consultado, el jefe policial informó que se han registrado cerca de 30 incidentes viales, “comprendidos entre los límites de los partidos de Mercedes y Alberti, sobre Ruta Nacional N°5; entre los que se destacan accidentes del tipo frontal o por alcance, donde en su gran mayoría, se han producido lesiones de consideración (leves o graves), como así también lamentablemente se han cobrado la vida de seis ciudadanos, resultando alguno de ellos vecinos de esta localidad”.
Causas de la siniestralidad
“Los accidentes de tránsito son el resultado de una combinación de diversas causas que interactúan en el momento del siniestro”, apuntó y destacó que las condiciones y la conducta del conductor, como así también el estado general del vehículo forman parte de la mayoría de los accidentes que se desencadenan a diario.
¿Qué rol asume el conductor?
En esto destaca la conducta humana como principal factor de incidencia en la complejidad de la accidentología, y detalla que, “primeramente las condiciones de quien está a cargo del manejo del vehículo, principalmente la falta de atención y concentración al momento de la conducción; por supuesto el consumo de sustancias que afectan la capacidad de reacción y la fatiga, son factores que aumentan el riesgo”.
La impericia es otro aspecto que enumeró, “es decir, la falta de habilidad o experiencia al volante, también juega un papel crucial, ya que un conductor inexperto puede no saber cómo reaccionar ante situaciones inesperadas”.
Sobre el comportamiento del conductor, destaca la imprudencia al volante en primer término, “como exceder los límites de velocidad, realizar maniobras peligrosas (como lo puede ser un adelantamiento indebido); desatender las señales de tránsito (vertical y/o horizontal que se encuentran en la vía), esto contribuye significativamente a la siniestralidad; la falta de consideración hacia las normas viales pone en riesgo no solo al conductor, sino también a otros usuarios de la vía”.
Las condiciones del vehículo
“Un vehículo en mal estado puede ser la causa de muchos siniestros”, observó ante la consulta, “el faltante del sistema lumínico o señalamiento, neumáticos desgastados, frenos defectuosos, como así también, otras fallas mecánicas pueden llevar a la pérdida de control; la negligencia en el mantenimiento del vehículo es una causa común de accidentes”.
Aumento de despistes y vuelcos
Así lo observó, sobre la zona de la Ruta 5, entre Mercedes y Alberti, “se han registrado un aumento preocupante en cuanto despistes y/o vuelcos sobre distintos tramos, como así también, en las distintas rutas provinciales que conectan de alguna forma con esta localidad, tales como la RP N° 51 y la RP N° 30; quedando los rodados involucrados ubicados sobre la traza, banquinas o préstamos de las mismas, no generándose lesiones de complejidad como resultado de ellos”.
¿Cómo se evitan los siniestros viales?
En términos concretos, los accidentes son descritos como eventos que son inevitables, no así los siniestros que son cuestiones evitables y que tienen el factor humano como principal promotor, “lo más claro y simple; y sobre todo efectivo, es prestar r atención durante la conducción; evitar distracciones como el uso del teléfono móvil; observar las distintas señales de tráfico y los vehículos que circulan en la vía; respetar las normas de tránsito y obedecer los límites de velocidad y las señales verticales/horizontales ubicadas en la vía; usar siempre el cinturón de seguridad y el casco en el caso de las motos; mantener el vehículo en buen estado; realizar un mantenimiento regular de frenos, luces y neumáticos; asegurar que todos los sistemas del vehículo funcionen correctamente; adaptarse a las condiciones climáticas, es decir reducir la velocidad en condiciones de lluvia, niebla o nieve. Mantener la distancia de seguridad, sobre todo en condiciones adversas; usar las señales de giro, indicando siempre las maniobras a realizar para que el resto de los conductores o peatones estén al tanto; ceder el paso en los pasos peatonales; mantener distancia segura en el caso de los ciclistas; evitar conducir cansado y tomar descansos breves en el caso de viajes largos.
La cultura vial es entre todos
“Es importante entender esta premisa, hay que conducir con empatía, ser paciente y evitar la agresividad al volante”, reflexiona, “mantener la calma en caso de exceso de tráfico o embotellamientos”.
Por otra parte, agregó, “ser consciente de nuestras propias limitaciones, si estamos cansados, hay que detenerse o cambiar de conductor; si se consumió alcohol o alguna sustancia, hay que optar por un transporte alternativo”.
Tolerancia Cero al Alcohol en sangre
En el marco de la implementación de la ley nacional y provincial de “Cero Alcohol al Volante”, indicó que, “esta normativa se implementa para reducir significativamente los accidentes de tráfico relacionados con el consumo de alcohol, y promover una conducción más segura. Se realizan pruebas de alcoholemia de manera regular en carreteras y eventos para asegurar el cumplimiento de la normativa”.
“La accidentología vial es un problema multifacético que requiere la colaboración de todos los sectores de la sociedad”, concluyó, “como efectivos policiales, estamos comprometidos a trabajar en la prevención y concientización, pero necesitamos la cooperación de la ciudadanía para reducir la siniestralidad en nuestras calles. Juntos, podemos construir un entorno más seguro para todos”.