Motoviajeros de Chivilcoy
Juntos a la par, de Río Gallegos a La Quiaca a lo largo de la ruta 40
Una pareja de nuestra ciudad, recorrió entre febrero y abril más de 13.000 kilómetros en moto, de su a norte, viendo los paisajes y climas del país. Se propusieron matrimonio, al llegar a Ushuaia.Rocío Felice y Nicolás Herrera, son dos jóvenes de nuestra ciudad que decidieron realizar una aventura que les durará para toda la vida, que es el recorrido en moto de la ruta 40, desde lo más extremo del sur de nuestro país, Río Gallegos, a la última frontera norte, que es La Quiaca, más de 13.000 kilómetros de ruta, entre la ida y la vuelta.
Ambos tienen 26 años y se conocen desde los 14 años. Son del barrio del Hospital Municipal, y para hacer más significativo e inolvidable esta aventura, Nicolás le pidió casamiento a Rocío, en la ciudad de Ushuaia. El regreso está previsto para este domingo.
LA RAZÓN se contactó con la pareja de motoviajeros que en ese momento estaba en Córdoba, para que no compartan tan hermosa aventura. “Estamos juntos desde la adolescencia, actualmente tenemos 26 años. Una vez que cumplimos la mayoría de edad empezamos a manejar motos pequeñas, hasta que empezamos a salir a las rutas”.
“Primero fue a Buenos Aires y tramos cercanos, hasta que nos empezaron a llamar los viajes largos. Así es como viajamos Córdoba, Tandil y otros lugares, hasta que el año pasado quisimos llegar a La Quiaca. Nos voló la cabeza el norte y pensamos en recorrer la ruta 40, desde el kilómetro cero hasta el último y de ahí surgió hacer el itinerario del viaje y acá estamos, con el desafío ya completo”.
Aventura de sur a norte
Es importante destacar el relato de Rocío y Nicolás, siguiendo las palabras e ideas uno del otro durante la entrevista. “Es la primera vez que recorremos esta ruta, salimos el 5 de febrero desde Chivilcoy. La idea era unir, primero, con la ciudad de Ushuaia y, desde ahí, empezar el kilómetro cero que está en Río Gallegos y luego toda la ruta 40”.
“Fue una travesía donde nos pasaron un montón de cosas, como el cruce en ferry del estrecho de Magallanes, el último tramo de la cordillera de Los Andes, vimos nieve en Ushuaia en pleno verano, pasamos los vientos patagónicos que son terribles, así que tuvimos que lucharla”.
La pareja de motoviajeros llegó a La Quiaca el 2 de abril luego de haber cruzado el abra del Acay, uno de los pasos de montaña más altos de Latinoamérica, con casi 5.000 metros de altura. “Fue un camino súper difícil, porque estaba empedrado, en subida y con el cruce de ríos. Hay veces que la ruta nacional ya deja de ser ruta y pasa a ser un lugar agreste. Justamente, en verano, esta parte de la ruta es clausurada por la época de lluvias, por eso queríamos pasar cerca de abril, pero se atrasaron las lluvias. De todas maneras el camino se puso intransitable. Le dimos aviso a la policía y decidimos tomar el riesgo. Por suerte salió todo bien, es algo impagable haber llegado hasta ahí”.
Y para hacer un viaje de estas características, Nicolás y Rocío usaron una moto para estos terrenos. Usan una Dominar 250, modelo 2021. “Llevamos bidones extras de nafta ya que en plena ruta 40 no ves estaciones de servicio y además pinchamos varias ruedas”.
Gente solidaria
Preguntados en relación a la interacción con la gente, la pareja de Chivilcoy destacó el buen trato que recibieron en cada lugar que llegaban. “La gente ha sido hospitalaria, no sé si es porque viajamos en moto, pero encontramos mucha solidaridad, te ayuda, te pregunta si necesitás algo. Si estás en la ruta te encontrás con gente que te da un mate y te pregunta si está todo bien. Hemos encontrado bastante buen trato de las personas, a largo de los kilómetros que hicimos. Además compartís la ruta y te vas haciendo de amigos de todo el país a lo largo de la ruta 40”, manifestaron.
Y a partir de esta aventura, los motoviajeros van por más y tienen pensado recorrer todo el país en moto. “O lo que más se pueda. Hemos tenido muchas invitaciones, no sólo de Argentina sino también de Uruguay y Brasil, así que cuando lleguemos estaremos planificando un próximo viaje. Pero este fue un viaje especial, porque cruza muchos parques nacionales, más de 11 provincias, todos los paisajes y los climas, es una experiencia que nos durará toda la vida”.