Carla Rímola
“Es bueno que a la danza también se la vea como un trabajo”
La coreógrafa de danza clásica y docente de la UNA fue entrevistada en Radio Chivilcoy. “Es bueno que la gente tenga la posibilidad de ver todas las danzas”, opinó.Carla Rímola es una de las chivilcoyanas exitosas, debido a la pasión que le puso a la actividad que hace, que es la danza clásica contemporánea. A través de su trayectoria, ha tenido la oportunidad de formarse y recorrer América Latina y Europa, siendo parte de grupos de coreografía y como docente de la Universidad Nacional de las Artes (UNA).
Rímola fue entrevistada en el programa “El Trapecio”, de Radio Chivilcoy, en el marco del Día Nacional del Bailarín que fue el 28 de febrero, donde habló de sus inicios, actualidad y de su actividad en general. “Empecé a bailar a los 11 años, de la mano de María José Prieto, en su estudio, haciendo tango con Rogelio Farías. A los 15 me incorporé al Ballet Chivilcoy, que dirigía el Chango Risso y Liliana López. Luego empecé a hacer coreografías dirigidas por Facundo Risso”.
“A los 18 años me fui a estudiar a la ciudad vecina de Salto, a un instituto de danza contemporánea y clásica. Estudié intensivamente tres años, me recibí de técnica en danza clásica y posteriormente me trasladé a Buenos Aires a seguir en ese rubro. Ingresé a la Universidad Nacional de las Artes (UNA), egresé en 2014 y actualmente hace 8 años que soy docente de ahí”.
Latinoamérica y Europa
Carla Rímola es coreógrafa, como bailarina y docente. “También codirijo hace 10 años, con una compañera que se llama Laura Figueira. Dirigimos una obra que la llevamos por distintos lugares de Latinoamérica, además de teatros muy importantes como el Colón, el teatro de La Ribera y el teatro San Martín. También estuve en una obra donde bailo, que se llama ‘La Wagner’, cuyo autor es un coreógrafo muy querido que se llama Pablo Rotemberg. Con ese espectáculo hemos viajado por muchos lugares de Europa y de Latinoamérica durante 10 años”.
Asimismo, enfatizó que el año pasado estrenó una obra llamada “La era del cuero” en el teatro San Martín. “Este teatro tiene su propia compañía de danza donde estuve como coreógrafa. El año pasado interpreté la obra y estuvimos en la sala Casacuberta haciendo temporada durante meses de noviembre y diciembre”.
“La danza es un trabajo”
En cuanto a su profesión, Carla Rímola opinó que “es bueno que se la vea como un trabajo”. “Hay organismos del estado como el Instituto Nacional del Cine Argentino (INCAA), el Instituto Nacional del Teatro (INT) que promueven la actividad, pero la danza no tiene instituto. Hace diez años que nos estamos organizando para que en Argentina exista la Ley Nacional de Danza, porque es un trabajo al igual que otros. Hay mitos que se crean alrededor del artista que dicen que nuestra actividad no es un trabajo, lo que la precariza mucho”.
“Fui una de las primeras egresadas de la Universidad y es como que el campo laboral está lleno de profesionales muy calificados y formados, así que está bueno que el ámbito laboral se fortalezca para que esté a la altura de la formación”.
Próximas actuaciones
Rímola agregó además que “siempre estoy tratando de organizar un espectáculo con coreografías propias para presentarlo en Chivilcoy, pero hay que crear las condiciones, no es falta de ganas o de deseo, sino todo lo contrario, pero a veces las gestiones se vuelven complicadas”.
De hecho, el domingo será parte de una obra a dúo en la ex ESMA, llamada “Los ojos mudos, conversaciones sobre el dolor”. Es autobiográfica donde menciono cosas de Chivilcoy y la partida de mi madre y alguna vez quisiera llevarla a mi ciudad”.
Además, el jueves 9 de marzo, en el Centro Cultural Borges, en Galerías Pacífico, será parte del elenco de “Polvaderal”, donde además tocará el piano el músico de Chivilcoy Santiago Torrichelli.
Otros conceptos
Durante la entrevista, Carla Rímola expresó otros conceptos en relación a la actividad que desempeña: “Hay muchos prejuicios, como que la danza clásica es la hegemónica y, en el imaginario colectivo se dice que todo lo que la danza clásica profesa, es lo que todas las danzas deberían hacer. Que hay que tener determinado cuerpo, edad… Es algo que yo lo tenía inculcado”.
“En cuanto a los espectadores, quizá uno no pueda ir a ver un espectáculo de danza al Colón, una institución con muchos recursos, pero me gustaría que todas las danzas tuvieran sus posibilidades de desarrollo, recursos y exhibición. La danza clásica tiene privilegios porque es así, porque es la danza de la corte, de Europa”.
“Por supuesto que acá se hace esa danza y por supuesto que se vuelve popular porque en cada barrio y esquina hay una profesora enseñando ballet, así que es bueno que la gente tenga la posibilidad de ver todas las danzas”, concluyó.