Pasión por los viajes / Por Diego Magrini
"Mi sueño era viajar por el mundo"
En diálogo con LA RAZÓN, Claudia Latessa contó su experiencia como agente oficial de Disney, anécdotas de distintos países y la meta de concretar sus proyectos.El mágico mundo de Disney, es sin dudas la fantasía de cualquier niño. Poder conocer las diferentes atracciones y estar con los personajes de las grandes historias que todos conocemos o vimos en las películas. Pero estar ahí, tiene un condimento especial, una experiencia extrasensorial que al menos, una vez en la vida, hay que sentirla.
Es el caso de Claudia que desde la temprana edad de 10 años percibía que iba a conocer ese maravilloso mundo; de hecho lo visitó en varias oportunidades y recorrió entre 26 o 27 países.
"Toda la vida me gustó viajar, tenía 10 años cuando pedí que me mandaran a aprender inglés porque decía que el día de mañana iba a recorrer el mundo", relató y agregó: "En algún momento comencé a viajar".
"Siempre de chica tuve la pasión por Disney y dije que tenía que conocer Disneylandia", confesó y añadió: "Me enteré hace poco más de un año por las redes sociales que alguien dijo que estaba buscando latinos que quisieran trabajar para Disney siendo agentes oficiales".
"Esas cosas que tiene la vida porque no soy de mirar las redes sociales en vivo, pero fue ahí donde otro fanático Disney dio a conocer la noticia, entonces fui rápidamente a anotarme y empecé a pasar distintas pruebas, exámenes y capacitaciones hasta que un día dijeron que éramos los 50 elegidos de toda Latinoamérica para trabajar", amplió la profesora de inglés.
E indicó: "Me eligieron porque había viajado muchas veces a Disney, uno de los requisitos era conocer bien el producto como ellos lo llaman, por ejemplo tienen un hotel muy grande en Hawai también temático, una isla privada en Bahamas que se puede ir en el Crucero Disney donde hacen esos recorridos".
Asimismo, explicó que durante la pandemia había empezado a estudiar turismo porque le gusta viajar y surgió la oportunidad de ser agente Disney. "Ya estoy feliz por ser parte, más allá si venda o no viajes", exclamó con una sonrisa dibujada en el rostro.
Durante la semana se dedica a dar clases en escuelas, también en su instituto privado, y sábados o domingos arma reuniones e informa sobre los viajes. Además, se pueden ver las publicaciones a través de instagram. Vale mencionar que se puede elegir los distintos servicios, es decir no hay un paquete estándar sino que es personalizado para cada grupo o persona.
"Continuamente se están agregando atracciones nuevas, hay que vivirlo para saber lo que es estar dentro de los parques", afirmó y señaló: "No tenemos algo temático en Argentina para poder compararlo".
Por otro lado, dentro de la agencia descubrió que Panamá era uno de los lugares económicos, por eso empezó a ofrecerlo, ya que es un lugar más tranquilo, para alguien que no les interesa los parques, poder ir a descansar y a las fantásticas playas panameñas es una buena opción.
Viajes por el mundo
"El hecho de dar clases me permitieron comenzar a viajar, yo sabía que llegaban las vacaciones y me iba a algún lado...ahí empezó esta gran aventura", expresó Claudia.
Uno de los viajes que recordó fue por el norte de Tailandia donde vivió una experiencia única con una tribu del lugar en medio de las montañas, durmiendo en choza, bañándose en el río y tuvo que alumbrarse con una ramita durante la noche. También algunos de los países que se sorprendió por la diferencia cultural con la nuestra fueron Marruecos, Malasia, Singapur y Japón. Por otra parte, los últimos lugares que visitó fueron Alemania e Italia, y en Nueva Zelanda, México, República Dominicana y Estados Unidos nadó con delfines, tiburones, y practicó buceo.
Una persona decidida, madre y profesional, segura y con el objetivo fijo muestra que “querer es poder” porque hasta en situaciones difíciles buscó la manera de continuar la marcha conociendo diferentes puntos del planeta tierra, como viajar de mochilera cuando no contaba con suficiente dinero, que por otro lado, se pueden atravesar vivencias muy interesantes.
"Cuando era chica, al no haber internet, mandaba cartas a las embajadas de los distintos países y al tiempo me llegaban sobres con toda la información porque yo sabía que en algún momento los iba a visitar, y de a poco fui concretando mi sueño", concluyó.