24 de enero, Día Internacional de la Educación
“Cambiar el rumbo, transformar la educación"
El 24 de enero se celebró el Día Internacional de la Educación. Fue proclamado así por la Asamblea de las Naciones Unidades, en el año 2018.Según esta organización, sin una educación de calidad, inclusiva, equitativa para todos y sin oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida, los países no lograrán alcanzar la igualdad de género, ni romper el ciclo de pobreza que deja rezagados a millones de niños, jóvenes y adultos.
La pandemia ha demostrado que todavía queda mucho camino por recorrer para lograr esa educación.
Con motivo de la celebración de este día, la Directora General de la UNESCO, Sra. Audrey Azoulay, se ha expresado en este 2022, con un mensaje que, entre otras, incluye las siguientes ideas:
“Hoy, cuando celebramos el cuarto Día Internacional de la Educación, nuestro mundo se encuentra en un punto de inflexión.”
“Todavía no hemos cumplido nuestro compromiso de garantizar el derecho a una educación de calidad para todos. Los trastornos provocados por la Covid-19 no han hecho más que agravar una crisis educativa que, incluso antes de la pandemia, excluía a 268 millones de niños de la escuela, especialmente a las niñas.”
“En esta época excepcional, no podemos seguir haciendo lo mismo de siempre. Si queremos transformar el futuro, si queremos cambiar el rumbo, debemos repensar la educación.”
“Se trata de forjar un nuevo contrato social para la educación, como se pide en el informe de la UNESCO sobre los Futuros de la Educación, publicado el pasado mes de noviembre. Tenemos que reparar las injusticias del pasado y orientar la transformación digital hacia la inclusión y la equidad. Y necesitamos que la educación contribuya plenamente al desarrollo sostenible, por ejemplo, integrando la educación ambiental en todos los planes de estudios y formando a los docentes en este ámbito.”
“Para ello, se ha de poner en marcha un amplio movimiento que englobe a los gobiernos, la sociedad civil, los educadores, los estudiantes y los jóvenes para movilizar nuestra inteligencia colectiva y reimaginar juntos nuestro futuro.”
El lema de este año, entonces, es "Cambiar el rumbo, transformar la educación".
Es hora de concretar las promesas que se vienen realizando hace décadas. Es momento de priorizar la educación y ponerla en el centro de las agendas de los Estados. Sí, de los Estados; porque la educación no puede ser un derecho que dependa de políticas partidarias y de gobiernos de turno.
La educación es un derecho fundamental, un bien común y la base de un futuro sostenible y posible, ¿Qué estamos esperando para cambiar el rumbo?
Martina Valentini