Transportes de carga
“Hoy es prácticamente inviable poder mover un camión”
Así lo expresaron a LA RAZON los camioneros Marcelo Sabella y Pablo Valea, ante la situación que viven los camioneros de Chivilcoy.
Marcelo Sabella y Pablo Valea son camioneros de Chivilcoy y hablaron con LA RAZON sobre la situación que atraviesa el sector. Días atrás se tomó la decisión de aumentar los fletes a la tarifa de 385 pesos la movida. Esto regirá a partir de este lunes 15 de marzo.
Al dialogar con LA RAZON, los transportistas sostuvieron que “la situación del transporte de carga es complicada. A pesar que se dio un aumento del 22,5 por ciento, que no es un paliativo para las necesidades económicas que tiene el transporte, nos encontramos con productores, dadores de carga y acopiadores que no cumplen con la tarifa y el Estado Nacional está ausente ante estos actos, como que no le importa que el pequeño transportista tenga menos recursos”.
Consideraron que el transporte de carga sigue en emergencia económica y pareciera que nadie tiene en cuenta la parte elemental del transporte que son los costos logísticos. “Parece que lo único que consume el camión es gasoil y en realidad no sólo consume gasoil, porque las cubiertas en seis meses aumentaron el 160 porciento, los peajes subieron entre el 40 y 50 porciento, los seguros aumentaron en algunos casos entre el 40 y 60 porciento. El combustible subió en seis oportunidades. Hoy es prácticamente inviable poder mover un camión.
Remarcaron que “muchos clientes nos pagan con cheques a 50, 60 o 90 días. Cada uno paga de la manera que quiere y lamentablemente con la inflación que tiene el país un cheque a 60 ó 90 días estamos perdiendo el 13 porciento del valor de ese cheque. Lamentablemente esta situación nos lleva a la pérdida de nuestro capital, a la imposibilidad de poder seguir trabajando, porque si arrancamos el año con más de un 140 porciento de costos acumulados y la tarifa aumento el 22 porciento, que en muchos puntos del país no se cumplen, es una cuestión de cálculo matemático, donde queda reflejado el desfasaje que hay entre lo que es el pago de la tarifa y los costos”.
“Hay que tener presente que el más afectado es el pequeño y mediano transportista. No el grande. No quiero decir que el transportista grande no le afecta la situación, pero esta emergencia económica la sufre el pequeño de una manera diferente al grande. El transportista grande obtiene descuentos a lo que el chico no llega porque no puede hacer compras en masa y no goza de ese beneficio. El transportista grande compra el combustible por kilo, gomas en cantidades y se reduce el costo logístico y automáticamente aumenta el beneficio económico. Menos costo mayor ganancia”.
“Lamentablemente sigue una gran especulación y seguimos teniendo un Estado totalmente ausente ante las necesidades que tiene el transporte”, concluyeron.