“Panza llena, corazón contento”: Un recorrido por la Av. De la Tradición gastronómica

 “Buscamos revelar que nuestra identidad gastronómica se formó a través de los años, con múltiples aportes; y que al formar parte de la cultura, sigue cambiando con el tiempo” nos dice entusiasta Leticia.

En este sentido, cabe destacar que contó con varios “entusiastas” que acompañaron con éxito esta invitación a recorrer en bici, distintos lugares tradicionales de Chivilcoy como Don Pedrín, la Panadería Butteri y uno de los clásicos del Tradicionalismo Criollo como lo es “El Palomar”.

 “Imaginate qué viajás en el tiempo”, invita nuestra guía de turismo, “unos 100, 200 o 300 años atrás, ¿cómo serían las comidas en aquella época? Y si pudieras invitar a tu tatarabuela a cenar hoy, ¿qué pensaría de nuestras mesas? ¿Cuáles son las comidas que nos identifican?” 

De esta manera partimos desde heladería Trápani, luego de descubrir que en nuestro país las primeras recetas de helado se registraron en el año 1890 conociendo su particular método de preparación, para luego pasar por el ilustre Don Pedrín y compartir los distintos aportes italianos a nuestra gastronomía tradicional: la pizza y las milanesas, sus variantes argentinas y el particular origen de la “milanesa a la napolitana”.

Continuamos recorrido por la Av. Suárez hasta llegar a la famosa ex Glaxo, emblema del barrio que lleva su denominación, “la primera fábrica BTB, producía manteca, hielo y caseína” enumera Leticia y aparecen recuerdos de los famosos “lecheros” y las distintas anécdotas populares al respecto.

Pensamos en galleta de campo y pensamos en “la galleta de campo” al pasar por la tradicional Panadería Butteri, dando inicio al recorrido por la Avenida de la Tradición, con historias de los distintos almacenes de campo y su importancia en décadas pasadas, como así también los aportes culturales (y culinarios) de la inmigración italiana y española de finales del siglo XIX, derribando una creencia popular sobre los mentados asados gauchescos: “¡el gaucho no sólo se alimentada de carne asada!” nos dice Leticia, quien, además apunta el consumo de pichones como un ingrediente muy popular en esas épocas, “los palomares se hacían para la cría y consumo de pichones” nos dice mientras recorremos la esquina del boliche “El Palomar”.

Ya en el atardecer, nos recibe como siempre Paola Corrao, fundadora de “Raíces”, para disfrutar de un atardecer campestre a minutos del centro de Chivilcoy, en la que compartimos helados de “Trápani” comercio que acompañó la propuesta sustentable, “Raíces existe para reconectar a las personas  con su entorno proponiendo un alternativa de turismo diferente desde una veta ambiental y social” nos dice Paola “y el cicloturismo está enmarcado en esta mirada diferente, una forma de conectar con la naturaleza y redescubrir lugares de otro modo”.

Recorrer Chivilcoy en bici nos devuelve otra mirada de nuestro lugar. ¡Hasta la próxima propuesta de cicloturismo!.