En epidemia:
Réplica
Por Dr. Luis María MarianoDías pasados, publiqué una nota de opinión titulada “No me cuiden más”, la que tuvo una repercusión y fue generadora de comentarios que a mi criterio son producto de una lectura superficial. Por supuesto que los insultos no tienen género literario donde ubicarlos, pero sí, que hablan de quienes los profieren y no del destinatario de los mismos.
Así lo entiendo, porque inhabilita (el insulto), a una respuesta racional y razonable como réplica. Solo puede llevarnos a una confrontación de igual intensidad de improperios y alejarnos de la discusión de los conceptos que vertí en la nota.
Para refrescar la memoria, nunca se dijo que no hay que cuidarse como tampoco, no cuidar a los suyos. Se afirmó en todo momento el cumplimiento a las normas establecidas. Eso sí, que las cuestiono lisa y llanamente, porque no les creo. No es la primera vez que no les creo a los enriquecidos gobernantes peronistas / kirchneristas, pero esta vez, la decepción es mayor de la esperada.
Si se hace una lectura de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, advertirán que la detenida lectura de la nota, no se aparta de las mismas.
Lo que sí hace hincapié, es en la “administración del miedo” que nuevamente pone en la sociedad el propio peronismo.
A seis meses de gestión presidencial peronista / kirchnerista, no se avizora un plan económico que dijo tener; ninguna medida para sacar de la pobreza a aquellos que la padecen y que dijo saber hacerlo; ninguna medida antiinflacionaria a la que iba a combatir; que no dio los aumentos a los jubilados que prometió (20%); tampoco, el aumento generalizado de sueldos (20%) para reactivar la economía. Sólo se escuchan críticas a la gestión anterior para lo cual, sabía perfectamente cómo encauzar la economía argentina que la anterior gestión había destruido. Mintió en todo y continúa.
Digo y sostengo en la nota, que el presidente “administra el miedo” para distraer a la sociedad mientras su “socia” la vice presidente, realiza todas las gestiones para lograr definitivamente su impunidad.
Dice que la cuarentena ha sido un éxito, sin presentar parámetros de éxito a fin de que sea comprobable su afirmación. Ha presentado datos de otros países que no tardaron en reclamarle diplomáticamente sobre sus inexactitudes y a las que tuvo que rectificarse.
Simplemente estamos en presencia de nuevos mentirosos que lo único que persiguen, es su bienestar (el de ellos) y su impunidad.
Para los que desde su inteligencia solo pueden expresar insultos y también para aquellos que leen superficialmente buscando solo la confrontación, vienen a mí la enseñanza de Don Raúl Alfonsín que dijo: “El enemigo de la democracia es el intolerante, el hombre que no admite para nada la discusión: la república democrática es el consenso y para lograr el consenso se necesita el diálogo”.