Críticas a la obra anunciada por ABSA

“El problema de la ósmosis inversa es que será necesaria la remineralización del agua”

El aporte científico de Mauricio De Marzi, del CONICET, en la reunión pública que se llevó en el Concejo Deliberante.
jueves, 22 de febrero de 2018 · 00:00

El investigador del CONICET y doctor en bioquímica, Mauricio De Marzi, asesor de la Mesa Socioambiental de Chivilcoy, sustentó sus dudas sobre la utilidad de una planta de ósmosis inversa, propuesta por la empresa ABSA, en el sentido que será necesaria la remineralización, para que el líquido no pierda sus componentes necesarios para la salud.

Como fue informado en la edición del martes de LA RAZÓN, la empresa informó en la asamblea pública que se llevó a cabo en el Concejo Deliberante, que esta planta, con una inversión de 32 millones de pesos, se construirá en un plazo de 6 a 8 meses, pero fue cuestionada por los presentes.

Remineralización del agua

Mauricio De Marzi recordó que, hace varios años, en una reunión que se llevó a cabo en el INTI estudiaron desarrollos que emprendió el estado, con el objetivo de solucionar la presencia de arsénico en el agua. “Tenemos que aclarar que en Chivilcoy el problema no sólo es del arsénico sino los nitratos y todos los derivados. Desde ese punto de vista, una planta de ósmosis inversa no está mal planteado, porque sacaría todo del agua, lo bueno y lo malo, entonces, lo que estaríamos generando es agua tridestilada”.

El profesional enfatizó que, más que el tratamiento por ósmosis inversa, es “cómo se remineraliza el agua que se va a distribuir después. Ese es un punto muy importante, porque muchas aguas que pasaron por este sistema, luego deben ser remineralizadas. Es decir, en un litro de agua que se trata, se genera medio litro de ultra pura y medio litro del agua que tenía los minerales, es decir, de desecho. Entonces, hay que mezclarla, pero en una proporción tal que el arsénico no supere los límites recomendados por la OMS”.

En este punto, De Marzi subrayó que esa agua, que quizá tenga la calidad de arsénico adecuada para la salud, “no tiene el gusto adecuado, algo que es fundamental para su consumo”.

Como ejemplo, puso el agua que se ha distribuido en muchas escuelas del distrito. “Tuvimos muchos reportes de docentes y alumnos que no toman el agua que se reparte la empresa ABSA en grandes contenedores, porque dicen que tiene un gusto horrible. Si el gusto del agua hace que no sea tomable deja de ser potable”.

Información de la empresa

Por otro lado, De Marzi destacó la obligación de ABSA de informar los resultados de sus análisis. “Que el consumidor pueda ver esos números y la calidad del agua que consume, aunque no se estén cumpliendo con los porcentajes de arsénico, porque sé que es difícil y puede generar consecuencias, pero es necesario publicar esos resultados”.

“Como consumidores –remarcó- tenemos derecho a saber cuál es la calidad del agua. Hace muchos años presenté una nota a la empresa, pidiendo esos resultados y se me negaron. Sabemos que hay fluctuaciones, casi cada día, depende de cómo se explota un pozo, porque si se sobre explota va a aumentar el arsénico, porque está en los sedimentos y a medida que lo arrastra el agua, va a ir creciendo”.

Nitratos y sulfuros

El bioquímico aseguró que los nitratos “son un problema de origen humano” y es necesario “sacar los derivados del nitrógeno del agua, porque sin tan perjudiciales como el arsénico. En algún momento se deberá hacer un estudio para saber cuál es el origen del nitrato y si se ataca esto, mejorará la calidad del agua”.

“Nadie tiene la culpa de la presencia de arsénico en el agua, pero sería bueno que la empresa establezca un plan concreto y público con etapas, tiempos y objetivos claros para que se demuestra la mejora de la calidad del agua a lo largo del tiempo”.

Finalmente, en referencia al acueducto desde el Paraná para traer el agua a esta zona, De Marzi enfatizó que “ahí tenemos un problema que son los sulfuros”, por lo que sería necesario pensar en algún tratamiento especial de esas agua para que sean potables.

Comentarios

23/2/2018 | 01:22
#164794
La RO (reverse osmosis) es una práctica común. Lo usa Coca Cola para todas sus aguas minerales. Y la remineralización se puede hacer directamente con sales, no necesariamente volver a mezclar con el agua con arsénico. En Israel es moneda corriente y se hace con agua de mar. Nada raro, es una buena solución. Cara, pero solución definitiva al problema del arsénico y otros contaminantes.
23/2/2018 | 00:06
#164793
Grande Mauri, estás en toda!!!! aprenda ABSA, no piensen tanto en la platita y en como joder a la gente con los aumentos, estudien y obtendrán los resultados de Mauricio
22/2/2018 | 12:45
#164792
Se habló de mezclar las aguas después del proceso de ósmosis inversa para obtener un agua de excelente calidad. Ahí se vuelve a mineralizar. Por el tema del gusto, agregale cloro que es el gusto toda la vida y bien que la tomamos.