Dos monjas en Estados Unidos
– Dos monjas irlandesas llegan en un barco a Estados Unidos y una de ellas le dice a la otra:
”Escuche que la gente de este país come perros”.
– ”Aww” se quejó la monja, ”pero si debemos vivir en América, debemos comportarnos como los americanos, responde”
– Asintiendo enfáticamente, la madre superiora camina hacia el carro de perros y le dice al vendedor:
“Dos perros calientes, por favor”.
– El vendedor más que encantado de atender y satisfacer el deseo de las monjas, les envuelve ambos perros calientes en papel aluminio y se los entrega en el mostrador.
Emocionadas, las monjas se apresuran hacia una banca del parque y comienzan a desenvolver sus “perros.”
– La madre superiora es la primera en abrir el suyo.
Ella comienza a ruborizarse y luego, mirándolo por un momento, se inclina hacia la otra monja y le susurra con cautela:
“¿Qué parte te tocó a ti?”