El gobierno apela a la Ley de Abastecimiento para congelar precio de combustibles
Si bien no hubo acuerdo con las petroleras, el gobierno avanzó con la medida de congelar los combustibles por 90 días aplicando la Ley de Abastecimiento.
El gobierno no logró acordar con las petroleras el congelamiento del precio de los combustibles que había anunciado ayer, por lo que hoy comunicó que aplicará la Ley de abastecimiento, la misma herramienta con la que había amenazado Guillermo Moreno en 2007.
La medida, que apunta a evitar en lo inmediato una espiralización de la inflación como consecuencia de la presión de devaluación del peso sobre los precios, había sido anunciada ayer por el presidente Mauricio Macri pero sin dar mayores precisiones respecto de cuáles serían los instrumentos para aplicarla.
Horas después, la Secretaría de Energía, que comanda Gustavo Lopetegui, emitió un breve comunicado en el que precisó que "la Secretaría de Gobierno de Energía informa que el congelamiento de precios de las naftas que anunció hoy (por ayer) el presidente de la Nación se realizará en acuerdo con las empresas".
Sin embargo ese acuerdo nunca se alcanzó -incluso no habría habido reuniones, sino simplemente contactos telefónicos- por lo que la misma secretaría de Energía comunicó que aplicará la Ley de Abastecimiento, para lo cual Lopetegui firmará una resolución conjunta con el secretario de Comercio, Ignacio Werner.
El congelamiento por 90 días del precio en pesos de las naftas, los gas oils y del crudo. Este precio será el que cada refinería había fijado con su proveedor. Se tomarán las variables del precio del dólar y el Brent del viernes pasado, 9 de agosto y del mismo modo mantiene estables los precios en las estaciones de servicio.
Dictada en 1974, pocos días antes de la muerte del Presidente Juan Perón, la Ley de Abastecimiento regula "la compraventa, permuta y locación de cosas muebles, obras y servicios" para "necesidades comunes o corrientes de la población" e incluye penalidades para los infractores, que en algunos casos puede llegar a ser la cárcel.
Es una herramienta utilizada en varios casos, pero con dos antecedentes que destacan: uno se dio en el gobierno de Carlos Menem, quien la usó para hacer frente a una huelga de camioneros y en 2007, cuando Moreno apeló a ella en el marco de una disputa con la filial petrolera anglo holandesa Shell.
En ese momento, el entonces secretario de Comercio de Cristina Kirchner llegó a amenazar con la cárcel que la norma prevé a José Aranguren que era el CEO local de Shell y luego fue el primer ministro de Energía de Macri, cargo al que llegó, en cierta medida, a partir de su actuación en esa pelea. (DIB) AL