Más alto, más rápido, más lejos...

lunes, 22 de octubre de 2007 · 00:00

Más alto, más rápido, más lejos...

Durante las dos últimas décadas del siglo XX el deporte de la ciudad de Chivilcoy protagonizó una explosión, tanto por la aparición de una enorme cantidad de disciplinas que antes ni siquiera existían, como por la cantidad de practicantes que se sumaron a cada una de ellas. Una cifra enorme, si tenemos en cuenta el deporte de élite, el deporte social, el deporte semiprofesional y el deporte amateur.

Hasta la década del '80, el deporte en la ciudad de Chivilcoy se limitaba a muy pocas disciplinas entre las que se destacaban fútbol, básquet, automovilismo, bochas, boxeo, ciclismo y apenas un par más. Sin dudas que el crecimiento de los medios de comunicación (televisión, radios, diarios, revistas, Internet, correo electrónico, telefonía celular, y muchos otros), mucho tuvo que ver con el despegue que experimentaron la mayoría de las disciplinas deportivas; algunas para quedarse y transformarse en algo cotidiano, y otras para tener un efímero apogeo y luego permanecer como un simple recuerdo.

Nuestros antepasados no tenían necesidad de hacer ejercicio. Por regla general, la vida era tan dura que la tarea de buscarse sustento ya les hacía moverse lo suficiente como para tener un cuerpo trabajado. Pero hoy estamos sentados tras una mesa o una computadora y aparecen las enfermedades generadas por el sedentarismo. Y, sin embargo, tras el esfuerzo físico que nos deja sudorosos, agotados y sin aliento, sabemos que es beneficioso para la salud; ¿por qué? No hay músculo que se resista al poder moldeador de los ejercicios, salvo el pequeño "stapedius" escondido en el oído interno, de los más de seiscientos que poseemos los humanos.

Actualmente, los habitantes de la ciudad de Chivilcoy tienen la posibilidad de elegir la disciplina deportiva que pretendan practicar, ya que en diferentes lugares y en distintas asociaciones o clubes, son innumerables las variantes ofrecidas. El atletismo en la Escuela Municipal y en el Círculo de Atletas; el ajedrez en el Club La Pampa; el básquetbol en los cinco clubes afiliados a la Asociación Básquetbol Chivilcoy; el billar y el casín en los clubes La Pampa, Racing y Social; las bochas en las entidades afiliadas a la Asociación Chivilcoyana de Bochas; el boxeo en los gimnasios de Rubén Fernández, Alberto Ledesma y Luis Bustabas; el ciclismo en el Club Ciclista Chivilcoy; la equitación en la escuela del Centro Tradicionalista El Fogón; el fútbol en los diferentes clubes afiliados a la Liga Chivilcoyana de Fútbol, y para los más grandes en los distintos torneos de fútbol amateur; la gimnasia rítmica y la gimnasia artística deportiva en el Centro de Educación Física Nº 12; el golf en la excepcional cancha del Club La Pampa; el handball en la escuela del Club Deportivo Colón; el hóckey sobre césped en el Club Racing; el karate en los clubes Racing y Deportivo Colón; el kung fú en el Club Gimnasia y en el gimnasio de Daniel Galante; la natación en el Club Racing y en el complejo Blue Fish; el paddle en los complejos Patio Paddle y del Club Florencio Varela; el pato en el campo de deportes "Martín Miguel de Güemes" del Centro Tradicionalista El Fogón; el polo en la estancia "Los Paraisos"; la pesca deportiva en los torneos organizados por la Peña El Pescador; el rugby en Chivilcoy Rugby Club; el tenis en las escuelas de los clubes La Pampa, Gimnasia y Esgrima y Deportivo Colón; el tiro en sus distintas especialidades en el Tiro Federal "General José de San Martín"; el tejo en "El Potrero de la Ñata" y en el Sindicato Empleados de Comercio; el vóleibol en el Centro de Educación Física Nº 12 y en el Club Argentino. Además, anualmente se disputan torneos especiales para los chicos, que a nivel local se denominan Torneos Interescolares (para varias disciplinas) y a nivel provincial se llaman Torneos Juveniles Bonaerenses (para varios deportes).
A través de algunos importantes hechos relacionados con el deporte de la ciudad de Chivilcoy en los últimos años, trataremos de refrescar una época realmente fructífera para nuestros representantes:


Pablo Alvarez medalla de plata Winnipeg

La aparición de Pablo Damián Alvarez como niño prodigio del tiro a mediados de la década del '90, provocó que muchos chivilcoyanos descubrieran este deporte. Ganando innumerables torneos a nivel nacional cuando todavía tenía edad de Juveniles, Pablo Alvarez se fue haciendo un lugar en el tiro, tanto que llegó la convocatoria para la Selección Argentina. Dando pasos firmes, fue confirmado como integrante del equipo que concurrió a los Juegos Panamericanos de Winnipeg en 1999, llevando por primera vez el nombre de la ciudad de Chivilcoy a la máxima cita del deporte amateur de América.

Y allí, el tirador de nuestra ciudad superó todas las expectativas y sorprendió gratamente al ambiente deportivo. A los 21 años, escribió el capítulo más glorioso de su carrera, al ganar la medalla de plata en la especialidad rifle libre tres posiciones con un total de 1224,2 puntos (la de oro fue para el norteamericano Kenneth Johnson y la de bronce para el mexicano Roberto Elías). Con ese resultado, Pablo Alvarez superó la mejor actuación histórica del tiro argentino en un Juego Panamericano, que hasta ese momento pertenecía a Ricardo Rusticucci, con medalla de bronce en Mar del Plata 1995.

Varios medios nacionales reflejaron la noticia: el Diario Clarín dijo "En tiro, Pablo Alvarez logró la medalla de plata", agregando "Es un chico de 21 años nacido en Chivilcoy que no estaba entre los favoritos y provocó un gran impacto con su excelente desempeño"; por su parte La Nación expresó "El orgullo de Chivilcoy", agregando "Pablo Alvarez, de 21 años, logró la medalla plateada en tiro, rifle libre tres posiciones".


Su gran alegría y asombro no terminarían con la ceremonia de premiación en Winnipeg, ya que en Chivilcoy lo estaba esperando una recepción digna del mejor embajador. Una semana después de su consagración, Pablo Alvarez pisó suelo argentino y luego de atender a los medios de prensa en Ezeiza, regresó a nuestra ciudad. En su segunda casa (el Tiro Federal) lo estaban esperando los Bomberos Voluntarios, y allí se produjo la primera sorpresa para el medallista; sin embargo, el asombro iría creciendo a medida que el autobomba avanzaba por la avenida Mitre, luego avenida Sarmiento, para desembocar en el paseo central de la ciudad. El punto culminante se dio frente al municipio, donde estaba apostada una cantidad de público superior a la esperada, a pesar de ser un día laborable. La máxima autoridad de la ciudad, el intendente Rodolfo Bardengo, lo acompañó hasta el palco y allí recibió el afecto y el cariño de todo un pueblo. Pablo Alvarez recibió una plaqueta que le entregó el intendente, otra de la Dirección de Deportes, un plato entregado por el Círculo de Periodistas Deportivos y una copia del decreto que lo declaró como "Ciudadano Ilustre de Chivilcoy". La respuesta de la gente fue hermosa y no faltaron lágrimas en muchos de los que se acercaron a darle un abrazo. Pablo Alvarez respondió con pocas palabras y con la humildad de siempre, digna expresión de un joven que no tiene en las estridencias su mejor bandera, sino que muestra un perfil realmente bajo en cada aparición. Para completar la alegría, en diciembre de ese mismo año el Círculo de Periodistas Deportivos lo consagró como el mejor tirador de la temporada, otorgándole el Olimpia de Plata en la tradicional fiesta anual donde se juntan los mejores deportistas del país.

Esa medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Winnipeg le permitieron ganar una plaza en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000. Después vendrían más alegrías, como la medalla de bronce ganada en los Juegos Panamericanos de Santo Domingo en 2003 y una nueva clasificación para los Juegos Olímpicos, en este caso Atenas 2004. Sin embargo, aquella apoteótica semana de fines de julio de 1999, con la consagración en Canadá, serán guardadas para siempre por Pablo Alvarez y por todo el deporte de la ciudad de Chivilcoy.
 

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