Por Marcelo Elias
La Karpa
Finalmente el kirchnerismo duro acepto la derrota del paro interminable.
El rechazo de grandes sectores de la sociedad, el perjuicio directo a los chicos y por supuesto a los padres no fue suficiente para detener la dinámica de confrontación.
El freno al sector más duro de la dirigencia o, lo que es lo mismo, mas kirchnerista fue la actitud de la mayoría de los docentes que fueron debilitando el paro como herramienta reivindicativa.
Igual no pudieron contenerse y ante la frustrada instalación ilegal de la escuela itinerante y la supuesta "represión salvaje” convocaron un increíble paro nacional que corono el desfasaje entre sus análisis y acciones con la realidad.
Según Yasky, la Karpa, y sus actividades, servirá para mostrar el modelo educativo, nunca explicitado, que proponen en contraposición con el supuesto ajuste neoliberal y el desprecio a la educación pública de los malvados Macri y Vidal.
Por supuesto las líneas sobresalientes de su discurso se refieren al presupuesto educativo y a los salarios, nada dicen de la calidad, de los resultados de las pruebas, que repudian, de la capacitación deficiente y los regímenes de licencias insostenibles y perjudiciales para los docentes que trabajan como es el caso de la Provincia de Buenos Aires.
Prefieren seguir esquivando la realidad a puro relato, desconocer que el salario mínimo aumento más del 70% durante los últimos 15 meses de 5600 a 9600 y que llegara con el ajuste próximo a 11300.
Que el Fondo Educativo creció de 8000 a 22000 millones y que el fondo compensador se asigna directamente a los docentes de menos salarios, siendo así más justo que cuando se asignaba a través de las administraciones provinciales.
Mientras tanto, gracias a la "lucha baradeliana” los docentes bonaerenses no han cobrado su aumento salarial y tampoco contaran en tiempo con el ajuste por inflación garantizado por la gobernadora Vidal.