24 de marzo, el luto de la democracia

Por una asociación apátrida cívico militar e intereses foráneos, se derroca al  Estado de Derecho y las instituciones ungidas al poder político por la voluntad y sufragio popular, hecho que enlutó al país sometiéndolo a una vida oprimida, cercenando libertades y Derechos Constitucionales. Quienes militamos y ejercimos el Derecho Político a través de cargos públicos, padecimos todas formas de persecuciones, fuimos encarcelados y otros tantos muertos por defender un ideal, una causa noble como lo es militar y expresar una vocación de servicio y patriotismo para el bien común del conjunto social. Felizmente aquel espantoso escenario desapareció, aunque nos dejó muchas secuelas,y hoy, gozamos del Estado de Derecho, aunque con un gobierno que no se destaca en amparar la masa pauperizada. Pero, a pesar de ello, a la democracia hay que defenderla y sostenerla. Conmemorar el "Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia"-a pesar que el gobierno actual intentó modificarla - es semejante al canto victorioso de nuestro Himno, aunque penda el negro crespón y nos retrotraigan a recuerdos muy tristes, particulamente, en nosotros, los que peinamos canas y estamos con vida, sobrellevando las secuelas del síndrome postraumático por haber sufrido en carnes propias la etapa del martirologio padecido en nuestra Patria.

Luis Angel Desia

(ex-concejal municipal M.I. y víctima del terrorismo de estado).