Los desafíos del peronismo chivilcoyano de cara a su primera elección sin ser gobierno

Tras la salida del poder en diciembre de 2015, el peronismo chivilcoyano aún no se presenta como una alternativa sólida para competir con posibilidades de triunfo en las legislativas de este año y además todo indica que habrá internas con dos o más listas. En sintonía con lo ocurrido a nivel nacional y provincial, la fragmentación fue evidente, incluso entre los sectores más alineados con el kirchnerismo no-randazzista, sumándose el prolongado silencio de Florencio Randazzo y su alejamiento casi definitivo de Chivilcoy desde el punto de vista político, sin interlocutores válidos en su territorio que pudieran bajar una línea del camino a seguir.

Dentro del PJ, la actividad se centró en la Juventud Peronista, que comenzó a despegarse de quienes fueran referentes del randazzismo, que por otra parte, brillaron por su ausencia durante todo el 2016. Ayer nomás, la JP publicó en las redes sociales:"La Liberación de la Patria no es tarea de una sola generación sino de varias, por eso hay que ir haciendo el trasvasamiento generacional”, insistiendo con la renovación y que se plantará ante lo "viejo”.

Los integrantes de la JP vienen del riñón randazzista pero, generacionalmente, crecieron políticamente dentro de la experiencia kirchnerista, y sus principales referentes se identifican, aunque con algunas críticas, con la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Por otra parte, son los que más siguen la tarea legislativa de los concejales del PJ-FpV en sus distintos bloques, que desde hace algunos meses, volvieron a mostrar una foto de unidad, ya sin Joaquín Oteiza, que se despegó y está en busca de "nuevos” horizontes.

También está trabajando en forma conjunta con Los Pasos Previos, agrupación surgida en Chivilcoy que tiene una banca de concejal con Fabiana Rocha y otros concejales en distintos distritos de la Cuarta Sección Electoral y desde hace poco más de dos meses, viene teniendo afinidad con el Movimiento Evita Chivilcoy, una organización con fuerte anclaje territorial en nuestra ciudad, con la que procedió a organizar un acto para fin de año en el salón del Auto Club Chivilcoy. En tanto, Leandro Févola es otro de los concejales que buscaría proyectarse con intenciones hacia el 2019 aunque tiene aún tres años en el Concejo Deliberante.

Por otra parte, varias agrupaciones peronistas y kirchneristas puras conformaron una mesa común en la que confluyen para trabajar por la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner en la Provincia y fundamentalmente, tratando de fortalecer ese espacio en la Cuarta Sección Electoral.

Quien se ha definido por esta postura es la agrupación Felipe Vallese, organización política que comienza a tomar mayor preponderancia a nivel local y regional a raíz de los dirigentes que la componen, en la que confluyen referentes de gremios, de la salud, de la abogacía, comerciantes y obreros, y que va por la candidatura de CFK. También se encuentran en esta sintonía Militantes Independientes del FPV, La Cámpora y Nuevo Encuentro.

Por otra parte, están los militantes que, desde el PJ, siguen impulsando la candidatura a senador de Florencio Randazzo. Ya han pintado varias paredes con Randazzo 2017. El ex Ministro de Interior y Transporte es un actor político fundamental dentro del peronismo bonaerense. Sigue en silencio en materia de declaraciones públicas pero no hacia adentro, que es desde donde hace filtrar su pensamiento. Sus intenciones son enfrentar a Scioli y que haya Primarias dentro de su partido. El escenario actual muestra a un peronismo provincial cada vez más unido donde el chivilcoyano no está tributando. En su entorno dicen que en marzo se lanza al ruedo.

Por otra parte, muchas organizaciones saben que si Randazzo es candidato, en nuestra ciudad habrá un importante sector que se alineará detrás, pero quienes no lo hagan saldrán a confrontar en las urnas. Y no son pocos. Corre la idea de que, en caso de que juegue en estas elecciones, no se "entrometa” en el orden local. Es época de descomprimir y legitimar a los futuros dirigentes.

Esto se vincula claramente con quienes condujeron este espacio político en Chivilcoy, siendo gobierno. Ariel Franetovich, Aníbal Pittelli y Darío Speranza fueron tres actores centrales en el territorio, con sus más y sus menos.

Franetovich solo apareció públicamente a través de una solicitada, más para pegarle a los propios que para hablar sobre el gobierno actual en una suerte de autodefensa hacia los cuestionamientos que se realizaron luego de la conformación de una comisión investigadora. Como Florencio Randazzo, se fue a su casa pero tampoco se retiró de la política ni mucho menos.

Aníbal Pittelli siguió en la actividad política junto a Norberto García, senador bonaerense, y siguió teniendo contactos con el objetivo de armar en la Cuarta Sección Electoral, pero con un ojo en lo que pudiera hacer Franetovich en Chivilcoy.

Darío Speranza es el que más intenciones tendría de volver al ruedo. Sigue siendo un hombre del randazzismo pero no sería candidato para ninguna alternativa política que enfrente a Cristina Fernández de Kirchner. Aunque viene de perder las elecciones en el 2015 ajustadamente, ya hizo el duelo. Además, nunca se alejó del todo. Siguió en contacto con las organizaciones políticas, participó de actos y marchas, algo que otros encumbrados dirigentes no hicieron, tal vez por el lugar en el que se ubicaron, o porque directamente tuvieron pudor a los posibles cuestionamientos y pases de factura que pudieran haberles realizado los militantes.

En este nuevo escenario reaparecieron dos históricos dirigentes peronistas. Jorge Juancorena y Omar Caselles. Otrora enfrentados en una salvaje interna que permitió al radicalismo quedarse con la comuna, pretenderían aportar esa experiencia para que el peronismo logre la unidad, pero muchos los miran de reojo.

El 2017 será bisagra para el peronismo a nivel nacional y provincial. No tanto para el chivilcoyano. Puede perder pero posicionarse como alternativa seria en el 2019 con dirigentes legitimados o volver con lo que ya fue. Una interna podría potenciar el espacio siempre y cuando no sea una carnicería.

Deberá confrontar, desde la oposición, contra Guillermo Britos, intendente de Chivilcoy, quien sabe que en las elecciones de medio término, siempre se plebiscita la gestión. Su andar en el primer año de gobierno tuvo altibajos pero afrontará un año con una importante caja para obras, que será bajada desde la Provincia.

Por otra parte, su futuro político dentro del massismo es una incógnita. Desde hace meses circulan rumores sobre conversaciones con otros espacios, incluso con el "randazzismo”. También tiene en la Provincia un viejo aliado y casi padrino político, Gustavo Ferrari, quien sería el jefe de campaña de Cambiemos en territorio bonaerense.

El peronismo afronta un enorme desafío en estas elecciones con muchos interrogantes por delante. En parte será resuelto por lo que se establezca en la superestructura partidaria. El resto vendrá con las negociaciones entre los sectores y el escenario político-económico-social que generen Macri, Vidal y Britos.