Por Marcelo Elias

Suma virtuosa

miércoles, 15 de noviembre de 2017 · 12:02


Hace dos años era impensable que en nuestro país reinara un clima de diálogo entre sectores políticos, gremiales, sociales, eclesiásticos y empresarios.
Hace dos años una mesa del presidente con los gobernadores de todos los colores aprovechada para dialogar y negociar sobre temas sensibles, no era posible ni imaginable.
Hace dos años un Congreso con comisiones trabajando en un clima de negociación, era un sueño.
No se podía plantear una discusión que sacara a la provincia de Buenos Aires de una situación de rehén del Gobierno nacional a partir de la expoliación de sus recursos.
La conjunción de gobernadores “débiles” y presidentes “fuertes” que iban por todo, Le costó a nuestra provincia, solo por el llamado fondo del conurbano, 500000 millones de pesos en una década. 
Hoy, con otras reglas de juego propuestas por el Gobierno y aceptada por la mayoría, todos los sectores dialogan y exponen sus posiciones, buscando síntesis y consensos para diseñar y ejecutar buenas políticas públicas, 
Así vamos andando, achicando la grieta, cada vez son menos los que cavan desde la intolerancia y el relato ciego, cada vez son menos los que levantan antinomias que durante mucho tiempo nos condenaron al atraso, al fracaso.
Pueden acordar los distintos niveles de la administración (nación, provincias y municipios) la distribución de recursos nacionales, un esquema tributario a favor de las inversiones y la producción y un diseño de gastos, que en el mediano plazo nos permitan salir del déficit que nos condena al endeudamiento o la emisión inflacionaria.
Es posible establecer un plan de blanqueo laboral y un esquema sustentable en el tiempo para la seguridad social.
Es posible modificar sectorialmente, sin prejuicios, condiciones de trabajo que permitan generar más y mejores empleos.
Es posible acordar entre los tres poderes correcciones presupuestarias y de funcionamiento que optimicen los recursos materiales y humanos. 
Todo es posible si cambiamos de actitud y ponemos las energías en sumar desde las diferencias en la búsqueda del bien común.
El gran ejemplo lo da el presidente al proponer eliminar el art. 104 de la ley de impuesto a las ganancias. Así devuelve al reparto de coparticipación automática millones de pesos que durante año manejaron arbitrariamente los ejecutivos de turno.
Asi se promueve la suma virtuosa, para que el todo prevalezca sobre las partes.

Comentarios

19/11/2017 | 22:58
#164795
Como me gustaría Sr. Elias que le enviara este comentario a su colega Manusovich, que parece tener una venda en sus ojos o algo que le impide ver las realidades.