Por Diego Manusovich
Cambiemos toma vuelo
Ya están entrando fácil vinos de Francia, arvejas de Singapur y fideos de Tailandia.
Ya, el maravilloso plan de "Cambiemos”, va tomando vuelo.
Ahora viene esa sensación imbécil y enfermiza en donde la gente consume cosas importadas a menos precio y se siente, por un tiempo, del primer mundo.
Luego seguirán más despidos, más cierres de comercios y fábricas nacionales.
Los más vulnerados caerán primero, como siempre. Ya sin contenciones sociales, el darwinismo del neoliberalismo se engullirá a las familias simples sin mayores herramientas para encontrar un sustento.
A todo esto, los dueños de la tierra viven su fiesta desde arriba de sus privilegios. Aplauden a rabiar a quien les dio más rentabilidad como si exportar porotos y yuyos en dólares a 15 pesos ya no fuera suficiente prerrogativa.
Ahora empieza a trabajar la máquina de hacer pobres. Gente que pierde el empleo o la changa y tiene que empezar a comer con menos proteínas o a vestirse con las ayudas que da la caridad.
Luego vendrán los lamentos del "tejido social roto” y la queja de los pudientes que ven amenazadas sus propiedades por la turba sorda y violenta.
"Cambiemos” dijeron los zombies. "Cambiemos que la yegua da muchas cadenas nacionales”. "Cambiemos que es bipolar dijo Nelson Castro”. "Cambiemos…”
Este comienza a ser el país que querían. Menor consumo, fronteras abiertas para contraer al empresariado nacional y aumentar el desempleo, fuente del disciplinamiento a los trabajadores.
Pero, a pesar que la Democracia es frágil y aún permite que un grupo debandidos arríe nuestras banderas en solo 7 meses, la gente no va a soportar muchos más embates. La luna de miel narcótica de los propios votantes de Macri, se va terminando. Los pajaritos que creían que venía el mesías están masticando el propio veneno de las políticas antipopulares del neoliberalismo de derecha.
Estos gobiernos no terminan bien. Porque encima son torpes. Ni siquiera son una derecha inteligente como para gobernar con astucia traicionando al pueblo sigilosamente. No. Vienen con esa prepotencia de niños ricos a patear el tablero como si acá fuéramos bebés depecho. Acá hay un 48% de los argentinos que queríamos otro modelo (se llame como se llame) y encima nos gusta el bombo y la calle.
¿Cuánto podrán Clarín, TN y La Nación ocultar todas las manifestaciones populares que llenan plazas, calles y avenidas?
Yo quiero respetar la Democracia y que Macri termine su mandato con nuevas elecciones. Pero ¿qué hacemos si sus decisiones políticas siguen lastimando a nuestro pueblo?
Feliz cumple 90 para Fidel Castro.
Seguimos pensando.-