Por Fernando Poggio
Una de cal y una de arena
El intendente Guillermo Britos dio a conocer una decisión sumamente positiva para el acceso a la justicia de los chivilcoyanos de bajos recursos. La creación de un nexo con las defensorías oficiales en materia civil y penal. Durante décadas se ha reforzado la persecución y la represión del delito y la parte acusatoria de la justicia pero nada se había hecho en relación a la posibilidad de defensa.
En la Argentina, ninguna persona es culpable hasta que un juez, luego del debido proceso, así lo declare. Estar imputado de un delito o contravención no implica ser delincuente o infractor. Por eso, todo habitante de este suelo tiene derecho a defenderse de las acusaciones que se les realice.
En Chivilcoy se crearon comisarías, subcomisarías, delegaciones de lucha contra el narcotráfico, contra el delito rural, centros de monitoreos, una Ayudantía Fiscal Descentralizada que corresponde a la parte acusatoria del Estado provincial. Pero faltaba un ámbito en el que las personas, que no estén en condiciones de pagar un abogado defensor ante la imputación de un delito, pudieran consultar o solicitar una defensoría oficial de carácter gratuita.
Guillermo Britos informó el pasado viernes que están muy avanzadas las gestiones con la Procuración General de la Suprema Corte de Justicia bonaerense para abrir una Casa de Justicia en nuestra ciudad, que permitirá tener personal judicial que hará de nexo con las defensorías del Departamento Judicial de Mercedes para las personas con escasos recursos. Se trata de una muy buena decisión en relación al acceso a la justicia de los chivilcoyanos.
En sentido contrario, se escuchan cada vez más reclamos, especialmente vía redes sociales y de comentarios que ha recibido quien escribe esta nota, del accionar policial en las actividades de control de nocturnidad.
En distintos espacios públicos o cercanos a pubs céntricos donde se reúnen jóvenes en horario nocturno, se habrían registrado situaciones que deben ser llamados de atención al accionar de las fuerzas de seguridad, como es el caso del arribo intempestivo de tres o cuatro móviles policiales a dichos lugares para realizar requisas bajo el argumento de hacer operativos "antinarcóticos” o por supuestos desórdenes.
Las quejas van desde maltratos verbales hacia los presentes hasta la utilización de efectivos policiales de civil que se desplazan en vehículos particulares y que, sin identificarse, trasladan a jóvenes a la comisaría por supuesto "desorden en la vía pública”. También se han escuchado reclamos sobre la llegada de policías para impedir que canten o toquen la guitarra en horario nocturno y en la vía pública, en lugares donde no se producen molestias a los vecinos.
El avance en mejorar el acceso a la justicia en Chivilcoy con la creación de este nexo con las defensorías oficiales es una decisión política del intendente Guillermo Britos como así también la del accionar de la policía local en materia de la nocturnidad, el tratamiento y la mirada que se tenga sobre nuestros jóvenes. Las consecuencias de ambas serán su responsabilidad.