Por Alejandro Perone

Randazzo, Kant y Max Weber

domingo, 21 de junio de 2015 · 00:00

Hace muchos años en la revista "Ethics" surgió un dilema. Dos médicos Juan y Pedro tratan cada uno uno a un paciente. Ambos están graves y con la misma enfermedad y sólo pueden elegir los médicos dos remedios A y B. Todas las revistas científicas dan a "A" como el mejor y avalado por los protocolos científicos. Los médicos odian a sus pacientes pero Juan es mejor intencionado y le da el remedio "B", (para joderlo más) pero resulta que el B, por azar u otra cosa, que el paciente de Pedro se cura y el de Juan se muere. Esto no es más que u ejemplo ilustrativo de la ética principista de filósofo alemán Inmanuel Kant, quien dice que los actos buenos o malos están motivados por la intencionalidad y no por el resultado. Para Kant lo único bueno es la buena voluntad. Para los resultadistas (si quiere puede llevarlos al fútbol, por qué no) se los llama utilitaristas, pragmáticos, (Hume, Jeremy Bhentam, -Maestro de Rivadavia-, John Stuart Mill, etc.). Desde el punto de vista de la nobleza Juan obró con nobleza y Pedro como un miserable pero lo salvó y demostró ser mejor médico.

Es decir, la ética de la intenciones propia de teólogos, filósofos y de todos los que estudian los problemas morales. "Todo el mundo, sobre todo la oposición, alabó la actitud del Ministro Randazzo de mantener la palabra (una actitud digna) y bajarse de la precandidatura a presidente y no aceptar ser candidato a gobernador de la pcia de Bs. As.; menos el 90% de los Kirchneristas.

Es que la ética del resultado es para militares, empresarios y políticos.

Robert Nozick dice qué hacer si un detenido sabe donde está la bomba que destruiría varias ciudades. ¿se lo puede torturar? Kant diría que no por más consecuencias que haya. Porque si todos torturasen a sus semejantes sería imposible la convivencia en la civilización. La ética del resultado demás está decir qué es o qué hay que hacer. Salvar a miles o millones de personas. Sí; son ejemplos extremos, pero es válido recurrir a ellos para ilustrar los problemas complejos del ser humano. Así podemos aplicarlo al aborto y a la corrupción, que siempre privilegian por supuesto la ética de los resultados por más sobreprecios o fraude que haya. El tema es ganar.

El Ministro obró manteniendo la palabra es decir fue coherente, principista. Sus compañeros cercanos lo respetan me imagino, (porque hay buena fe y aprecio); la burocracia parasitaria y aquellos que tenían expectativas de conseguir un cargo dirán toda la vida que se portó miserablemente (olvidándose de las cosas que hizo por ellos durante 12 años), que se equivocó.

Ahora bien, tengo que agregar que me gustó la actitud del Ministro (más allá de las muletillas de que todos somos parte del proyecto y demás giladas, mientras exista billetera), pero el tema es que él es político y en política rige, como dije, la ética de los resultados y Randazzo sabe mucho de eso porque desafió a Duhalde para ganarle a su mujer en la pcia. de Bs.As. e instalar a Cristina como futura presidenta. Fue en un momento cafierista, luego menemista, luego duhaldista y luego Kirchnerista. Es decir, si tomamos los últimos 10 o 12 años parecería un acto de traición de su Jefa. Si tomamos toda su carrera política podríamos endilgarle que él como nadie sabe que en política se privilegia el poder a la lealtad, y que siempre aplicó la ética del resultado. ¿Por qué ahora aplica la ética principista? (si nunca fue kantiano Florencio). Sólo él y su conciencia lo sabe. Es decir, Florencio no es teólogo o filósofo, es político. Eligió la ética equivocada para este caso (por más que a mí me guste). El tiempo podrá decir que lo capitaliza, que en realidad difiere el resultado para el futuro donde todos los tendrán en cuenta como un referente importante de la política. Yo creo que la Argentina y los seres humanos no son precisamente gente que elige la ética de las intenciones, es decir una sociedad atravesada en todos los estamentos por el resultado y el pragmatismo; coincido con Kant tarde o temprano se hace imposible la convivencia. Todo se pierde, todo es efímero, la amistad, el amor, el respeto, la gestión. Es decir casi todo, por no decir todos son resultadistas, sino mire, salvando las distancias que hace el Dr. L. Crespi con Britos. El general Perón como muchos líderes tenían como libro de cabecera "El Príncipe" de N. Maquiavelo", y vaya si lo aplicaba. (pragmatismo puro). A Ud. que es peronista y kirchnerista le quedará la última opinión. Ahora Scioli se transformará en un izquierdista revolucionario y 6/78/ (ya lo invitó donde hace un mes, -si sólo un mes lo mataba-hay que cuidar el sueldazo de panelista- o ética del resultado diríamos... impresentables!!!)

Bueno yo sólo quiero acercarle dilemas a los que siempre nos enfrenta la vida y hay que elegir, pero los miserables, los miserables siempre le achacaran esa actitud. La gente tiene amnesia corta de las buenas actitudes. El temor se olvida menos que el favor.

 

 

Comentarios

15/11/2017 | 21:34
#164794
Por favor, quien lo escribió es un galimatías y no lo entiende nadie. Que pena un tema interesante y también dos filósofos de fuste. Una pena.
24/6/2015 | 16:28
#164793
Con todo respeto estimado colega, me permito discrepar con su razonamiento. Creo que Randazzo, planteó una postura para su futuro político consistente en ser candidato a presidente o la nada. Las circunstancias de pertenecer a una agrupación política que valora encuestas en desmedro de las personas, hizo que le tocara la nada. Por lo que tomar a la nada como una postura principista a posteriori de lo acontecido, es a nuestro criterio un exceso que ninguna vinculación con la ética trae aparejada dado que esa alternativa, estaba planteada en su postura inicial.
21/6/2015 | 16:16
#164792
excelente comentario,alejandro.-