Entrevista
Diego Bernardini: “No tengas dudas que se puede y se debe aprender a envejecer”
El profesional y docente especialista en salud llegó a Chivilcoy para ofrecer una charla en el Museo Pompeo Boggio.La disertación del doctor Diego Bernardini, ofrecida en el Museo Pompeo Boggio sobre el envejecimiento, generó una expectativa superior a la que los propios organizadores esperaban al punto que debieron duplicar la cantidad de ubicaciones que había preparado.
La reunión, organizada en conjunto por las secretarías de
Cultura y Educación y Salud, contó con las presencias del doctor Guillermo
Britos, de los secretarios Adrián Vila y José Caprara, entre otras autoridades
de la comuna y mucho público local, interesado en el tema.
En el diálogo con LA RAZON ,el doctor Bernardini se refirió
a lo ocurrido en la casona de la calle Bolívar.
-Es buena la iniciativa que tienen las autoridades del gobierno
local de llevar personas de distintas formaciones para compartir experiencias
con la comunidad, pero lo más importante
es la respuesta que han tenido.
-Pero el tema es muy interesante…
-Es cierto, la salud es algo importante a lo largo de la
vida y la realidad es que hoy, el desarrollo, la comunidad, la sociedad, los
avances que tenemos, nos permiten vivir a edades muy avanzadas y con mucha vitalidad
y la charla fue orientada a es, cómo aprendemos a llevar adelante ese
irreversible paso del tiempo, para que el día de mañana, cuando seamos mayores,
podamos seguir teniendo una buena calidad de vida.
-En el encuentro se generó un ida y vuelta enriquecedor
-Es cierto, sobretodo porque los que hacemos docente lo
hacemos porque nos enriquece, nos enriquece escuchar y que el encuentro se convierta
en un diálogo. Consideré que iba a ser más interesante para todos, y para la
comunidad que a veces no tiene la posibilidad de estar mano a mano con un
especialista en salud, pero también para mí, porque me interesa aprender y
sobre todo de las personas mayores, e integrantes de una comunidad del interior
de la provincia de Buenos Aires, que no conocía.
-¿Cuál fue su saldo?
-Me quedó mucha alegría, mucha felicidad, quedó la
posibilidad de venir a atender aquí cada 15 días. Algo que me gustaría lograr,
porque podría cambiarme el dinamismo personal, que estoy asentado en Buenos
Aires hace 8 meses, así que no vendría mal un cambio.
Bernardini llegó a Chivilcoy acompañado de su esposa finlandesa e hijo,y sobre este acompañamiento dijo "Vine con ellos
para que conozcan una comunidad característica del interior de la provincia. Mi
hijo de 11 años se crió en el exterior,
de hecho hace 8 meses que estamos en Buenos Aires. Por eso les pedí que me acompañen
y lo han hecho sin problemas”.