“Hay que defender la exportación porque hace a la eficiencia y eficacia de la producción”

Un nuevo remate del sector ganadero llevó a cabo la firma Sáenz Valiente, Bullrich y Cía. S.A. en el predio de la Asociación Rural de Chivilcoy. En esta oportunidad salieron a la venta animales Holando cruza Jersey y para conocer la situación actual de la ganadería, como por ejemplo el mercado interno y las exportaciones, dialogamos con Gervasio Sáenz Valiente, quien manifestó a LA RAZON que "durante 10 años no pudimos exportar y nos fuimos comiendo los animales más liviano. La exportación tiene la virtud de dejar la misma cantidad de carne de la que se come, porque se puede exportar el 33 por ciento de un novillo de 480 kilos y queda en el país la misma cantidad de carne de que produce un animal de 300 kilos. Lo dificultoso de hacer entender es que debemos exportar el cuarto trasero del animal, porque nadie quiere llevarse el asado argentino, el pecho o la paleta, lo que si quieren son los bifes de atrás o los cuarto pistola. Hay que defender a muerte la exportación porque hace a la eficiencia y eficacia de la producción”.

"No puede ser que un animal preparado para producir 480 kilos lo estemos carneando en 300 kilos. Nos faltan 180 kilos de producción, porque el animal está preparado genéticamente para eso y si el problema es la terneza de la carne debemos volver a la maduración de la carne, con frigoríficos que puedan tenerla en la cámara frigorífica y no que la entreguen en 24 horas”.

Mercados

-¿Al productor ganadero le conviene exportar o el mercado interno es competitivo?

-El mercado interno es muy competitivo, pero le conviene exportar porque genera la mayor cantidad de kilos al menor valor posible. Eso se llama recría y la recría permite vender al animal entre 420 y 450 kilos, generando un beneficio al país y más fuente de trabajo.

-¿El gobierno debe tomar algunas medidas para que el productor no venda el animal en 300 kilos y sí en 420?

-No tiene que hacer nada, simplemente dejar que los mercados se vuelvan hacer, trabajar a favor al mercado internacional y cuidar al consumidor argentino. No me gusta consumir carne de 300 kilos, me encanta el asado de un animal de 450 kilos.

El gobierno no tiene que intervenir y sí acompañar, corrigiendo las cosas que están mal. Como medida puede ser que a partir de los 400 kilos no se pague impuesto a la ganancia.

Dios quiera que este país se normalice y todo lo que se ve y nos daña moralmente sea dentro de pocos años una historia fea, pero una historia al fin.