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Volver a vivir sin miedo. Un slogan falso

lunes, 6 de julio de 2015 · 00:00

Los ciudadanos de Chivilcoy, los de este país y los de cualquier lugar del mundo vivimos con miedo porque el miedo está en el ADN de todo ser humano.

Aunque resulte extraño, el miedo es saludable, porque posibilita evitar algo doloroso, llamando la atención, funcionando como una alarma, como un mecanismo de defensa. Es una emoción primaria e inmensamente útil.

Cuando uno lee un slogan que reza: "Volvamos a vivir sin miedo”, piensa que en algún momento alguien vivió sin miedo, lo que es falso, porque nunca un ser humano deja de tener miedo.

Entonces, ¿Qué se busca al elegir un slogan de este tipo? Probablemente que la gente active esa capacidad innata, que la gente tenga miedo, pero esta vez un miedo irracional, ante un peligro inexistente, como los padres que amenazan a sus hijos cuando se portan mal, con llamar al policía.

Es, entonces, solamente, una ardid publicitario, una artimaña, una mentira, sobre la que hay que tener un gran cuidado.

El miedo es un método de supervivencia, lo último que hay que hacer es vivir negando el miedo porque vivir sin miedo implicaría naturalizar el peligro, el real y el irreal, y esa naturalización nos llevaría a no sentir ante ese riesgo, convirtiéndolo en algo cotidiano y normal, quedándonos expuestos, sin esa defensa originaria que poseemos. Y esa indefensión podría llevarnos a realizar actos a partir de una consigna ilusoria. Igual que el niño, que cambia su actitud por temor a la llegada de ese personaje que no está capacitado para la tarea que esgrimen pícaramente sus padres: el policía.

Los que intentan insertar en el imaginario de la población esa falsa noción deben estar esperando un resultado, pero desconocen el concepto de esa emoción que nace cuando nacemos, esa emoción que nos permite adaptarnos a un contexto y protegernos de él.

Los que instalan el miedo presentan ante la sociedad el peor de los escenarios, con slogans y muchas veces con hechos pues se puede fácilmente emplazar un aparato delictivo en cualquier ciudad e instalar el miedo en los vecinos. En este punto es donde debemos prestar mucha atención y transmitir la idea entre los vecinos para evitar cualquier suceso "armado” para asustarnos.

Pero el miedo nos pone alertas y en actitud defensiva ante la llegada del enemigo. Y el enemigo no es otro que aquel que pretende instalar el miedo. Cuidado con los instaladores de miedo. Andan sueltos.

 

TIRSO.

Comentarios

8/7/2015 | 16:49
#164792
Tirso, pedís publicar en el diario y no ponés tu nombre? Que valiente...
6/7/2015 | 16:11
#164791
El pueblo sabe muy bien lo que es el miedo, lo que es salir de tu casa y que te roben y que a las casas hay que ponerles rejas y alarmas para tener una cierta tranquilidad. Y la gente sabe muy bien que Chivilcoy hace rato quedó de ser una ciudad tranquila de interior y pasó a parecerse a lo peor del conurbano. En octubre hay que tener muy presente el penoso estado de inseguridad, el pauperrimo hospital municipal, las rutas tercermundistas, el tren que tarda el doble de tiempo que hace 40 años y también hay que recordar el patrimonio robado de algunos ineptos que jamás trabajaron y que fueron puestos a dedo en funciones que no tienen ni puta idea y no estaban preparados ni paras gestionar un kiosko.