Nuevo libro

El lenguaje de las nubes

martes, 27 de enero de 2015 · 00:00

Islas del cielo, soplo en un soplo suspendido 

¡con pie ligero, semejante al aire, 

pisar sus playas sin dejar más huella
que la sombra del viento sobre el agua!

Octavio Paz


Cuando preguntaba a mis alumnos de diferentes edades ¿Qué es una nube? Solía obtener como respuesta: vapor de agua. El vapor de agua no se ve. Ahora bien, si por alguna causa este vapor se condensa o licua en pequeñas gotitas de agua líquida, o se solidifica en pequeños cristalitos de hielo, y estos o aquellas se acumulan, se hacen visibles y constituyen una nube.

Este hidrometeoro puede tener partículas de agua líquida o de hielo de tamaño apreciablemente mayor, así como partículas líquidas o sólidas no acuosas (vapores industriales humos y polvo atmosférico). En realidad las nubes están constituidas por gotas que caen, pero que debido a su pequeñez se evaporan mucho antes de caer al suelo. Cuando las gotas son suficientemente voluminosas, llegan al suelo en su caída y dan lugar a la lluvia.

Una nube es la expresión más importante de los procesos físicos que se producen en la atmósfera, es decir en la capa gaseosa que envuelve nuestro planeta. Representan un paso transitorio, aunque vital, en el ciclo del agua. Este ciclo incluye la evaporación de la humedad desde la superficie de la Tierra, su transporte hasta niveles superiores de la atmósfera, la condensación del vapor de agua en masas nubosas y el retorno final del agua a la tierra en forma de precipitaciones de lluvia y nieve.

El aspecto externo de una nube depende fundamentalmente de la naturaleza, dimensiones y distribución espacial de las gotas de agua o los cristales de hielo que la integran. Depende también de la incidencia de la luz y de la posición relativa del observador respecto de la fuente luminosa (Sol, Luna o la misma Tierra). Otro factor que tiene influencia es la altura de la base de la nube respecto de la superficie terrestre.

Las nubes pueden formarse y desplegarse en todos los niveles de la troposfera, desde = a 16 km de altura. Desde las nieblas, a nivel de tierra, hasta las altas nubes de hielo, encontramos toda una gama de nubes.

¿Te gustaría saber cuántas clases de nubes hay?, ¿de qué están hechas?, ¿a qué altura están?, o tal vez, ¿cómo crecen o desaparecen?

Las nubes demuestran la existencia de humedad en el aire, pero ¿Son siempre indicadoras de lluvia? Sabrías distinguir cuales la provocan y cuales no?

Hay muchos meteoros asociados a las nubes: desde los tornados al arco iris, pasando por los rayos, la lluvia o la nieve. Escribí "El lenguaje de las nubes" para invitarlos a introducirse en su estudio y comenzar a leer en el cielo.

 

Armando Eugenio Zandanel

 

 

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